FINANZAS

La UE aprueba el rescate a Irlanda, pendiente del Parlamento de Dublín

Los ministros europeos también aprobaron las condiciones asociadas al programa, centradas en "la reestructuración del sistema bancario, las reformas para potenciar el crecimiento económico y la reducción del déficit público al 3% del PIB en 2015".

La Unión Europea dio su respaldo definitivo al programa de asistencia financiera a Irlanda, al que Europa contribuirá con 45.000 millones de euros, con la vista puesta en el Parlamento de Dublín, que tiene previsto votar el presupuesto de 2011, el más duro de la historia del país.


La decisión constituye la aprobación formal del rescate acordado ya el 28 de noviembre, así como la prolongación por un año más de la fecha límite para que Irlanda sitúe su déficit por debajo del 3%, hasta 2015, que también fue consensuada en la reunión extraordinaria de ministros de Finanzas europeos que se celebró entonces.


Los ministros sí concretaron el interés que pagará Irlanda por los 85.000 millones de euros de asistencia -entre las aportaciones del FMI y de la UE- que se situará en el 5,8%, según la ministra española de Economía y Hacienda, Elena Salgado.


Los ministros europeos también aprobaron las condiciones asociadas al programa, centradas en "la reestructuración del sistema bancario, las reformas para potenciar el crecimiento económico y la reducción del déficit público al 3% del PIB en 2015".


Las cuentas públicas del ejercicio que viene, con las que el Gobierno de Dublín prevé ahorrar unos 6.000 millones de euros mediante recortes en los servicios sociales y subidas de impuestos, jugarán un papel crucial.


Este presupuesto, cuya aprobación no está garantizada ante la debilidad de la mayoría parlamentaria del Gobierno, es la primera fase del plan de austeridad cuatrienal, del que depende en gran medida el desembolso efectivo de todos los tramos de ayuda del plan de rescate financiero de la Unión Europea y del Fondo Monetario Internacional (FMI).


Los ministros recordaron a Irlanda que la ayuda será abonada en función del cumplimiento del programa negociado entre las autoridades irlandesas, la Comisión Europea y el FMI, en colaboración con el Banco Central Europeo, y que incluye metas de saneamiento fiscal.


Sin embargo, el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, consideró que existen razones para el optimismo, dado que la "economía real" irlandesa está dando muestras de recuperación.


En este sentido, Rehn confió en la "inteligencia, competencia y tozudez" de los irlandeses para superar las dificultades actuales.