EL COMITÉ LO CONSIDERA INCOMPLETO

Figueruelas critica el plan de Opel y la falta de inversiones para fabricar los nuevos modelos

La comisión permanente del Comité de Empresa de la planta zaragozana considera que el plan industrial de Opel contiene "puntos que no se sostienen", como la fabricación de la nueva generación del Combo y un coche eléctrico 'mini', porque la compañía los presenta sin especificar las inversiones ni de dónde se obtendrían.

La comisión permanente del Comité de Empresa de la planta de General Motors en Figueruelas (Zaragoza) considera "incompleto" el plan industrial presentado por la dirección para las factorías europeas de Opel, entre otros motivos por la ausencia de inversiones concretas para poner en marcha la nueva generación del Combo y un coche eléctrico 'mini'.


La comisión se ha reunido para analizar el plan industrial presentado al Foro Europeo de Trabajadores por la compañía automovilística, que estudia la fabricación de dos modelos, una nueva generación del Combo, que de salir adelante se produciría en Figueruelas, y un coche eléctrico, que podría recaer en la planta zaragozana o en la alemana de Eisenach.


Para la comisión permanente, se trata de un plan "incompleto" y con "puntos que no se sostienen", como la fabricación de esos dos nuevos modelos, porque la compañía los presenta sin especificar las inversiones ni de dónde se obtendrían.


Así lo ha indicado la secretaria del comité de empresa, Ana Sánchez (CC. OO.), quien ha destacado que la comisión permanente "comparte plenamente" la opinión del Foro Europeo de Trabajadores, que exige respuestas concluyentes respecto al plan de la empresa y una alternativa para el cierre de la planta belga de Amberes.


Ante esta situación, los sindicatos en Figueruelas también coinciden en que no cabe negociar un plan de ahorro que tendrían que asumir los trabajadores (que la multinacional cifra en 265 millones de euros anuales, 25,8 en la planta zaragozana) y que la compañía tiene que buscar una alternativa al cierre de la factoría de Amberes, ha dicho Sánchez.


No obstante, los sindicatos que dieron el visto bueno al preacuerdo con Magna antes de que GM decidiera no vender Opel (UGT, CC. OO., USO y Acumagme) valoran que se respeten los porcentajes de producción compartidos con la planta de Eisenach.


Ese acuerdo garantizaba para Figueruelas un volumen de producción hasta 2013 del 70 por ciento de la plataforma de vehículos pequeños (Corsa, Meriva y Combo) y el 72 por ciento a partir de esa fecha, mientras que Eisenach se haría cargo del 30 y del 28 por ciento restante.


El pleno del comité de empresa se reunirá previsiblemente la semana próxima, para definir su postura sobre la negociación del convenio colectivo y sobre si se abre o no la negociación local sobre los despidos, 900 de los 8.300 previstos en el conjunto de GM Europa, sin que esté completo el plan industrial.