CRISIS ECONÓMICA

Enrique Alberola ha advertido que las secuelas de la crisis en el mundo "van a ser duraderas"

El funcionario del Banco de España, coordinador Ejecutivo de Asuntos Interiores, ha afirmado que el mundo ha superado "posiblemente una situación de emergencia" y que la recuperación económica va a ser más duradera.

El coordinador Ejecutivo de Asuntos Internacionales del Banco de España, Enrique Alberola, ha advertido que las secuelas de la crisis en el mundo "van a ser duraderas" y que los niveles de deuda "serán mayores de lo esperado".


Alberola ha intervenido en el VIII Encuentro Santander América Latina de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, donde ha opinado que los mayores niveles de deuda, junto con el envejecimiento poblacional, suponen un desafío fiscal que no se ha evaluado en toda su dimensión.


El funcionario del Banco de España ha afirmado que el mundo ha superado "posiblemente una situación de emergencia", porque ha "salido de la UVI y está con respiración asistida". También ha apuntado que el mundo está todavía metido en un gran problema y quizá "los brotes verdes no son tales", sino el efecto de "la primavera".


Alberola ha advertido que las secuelas de esta crisis van a ser "duraderas" porque el mundo va ser mucho "más estrecho" y las políticas económicas tendrán unos "limites tremendos" en un momento en el que la velocidad de crucero de la economía será, en cualquier caso, menor que en la última década.


Este experto ha informado de que se ha hecho frente a la crisis con una respuesta "intensiva y extensiva", porque ha habido que afrontar una "situación de profunda emergencia desde todos los frentes y con todo el arsenal", lo que puede tener como consecuencia el regreso de problemas del pasado. Según sus datos, en las economías avanzadas se va a producir en el periodo 2007-2009 un crecimiento del déficit del 8 por ciento, un 3 por ciento consecuencia de las políticas anticrisis.


Asimismo, ha afirmado que habrá menos capacidad de intervención, "menos holgura", para los agentes económicos y los que deciden las políticas económicas y fiscales, que tendrán menos libertad y menos recursos en un mundo con menos liquidez y, probablemente, un menor crecimiento.


También ha opinado que en este contexto de crisis se han reforzado la coordinación internacional y la colaboración multilateral, lo que será "difícil de mantener" cuando pase la situación de emergencia. Y ha puesto como ejemplo a la Unión Europea, donde los mecanismos han acabado funcionando, pero después de la crisis se producirán "tensiones y fricciones" cuando, por ejemplo, los estados miembros tengan que cumplir objetivos de déficit.