CRISIS

El FMI prevé que España cierre 2009 con un déficit fiscal de más del 10% del PIB

El organismo insiste en que la situación económica del país es "frágil" y que es necesaria "una reestructuración fundamental", pero reconoce la labor de supervisión de los bancos.

Campbell, Lagarde y Geithner, responsables de Finanzas británico, francesa y de Estados Unidos.
El FMI prevé que España cierre 2009 con un déficit fiscal de más del 10% del PIB
s. jhaffe/efe

El déficit fiscal de España superará este año el 10% del PIB, pronosticó ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI), que pidió una reestructuración "fundamental" de la economía que incluya más recortes del gasto público. España está en una situación complicada, de acuerdo con el organismo internacional, con un déficit "que tiene que ser corregido" y al mismo tiempo una situación económica "frágil", agregó.

 

Marek Belka, el director del departamento de Europa del FMI, declaró en una rueda de prensa que el crecimiento potencial de España, es decir su capacidad para expandirse sin generar inflación, ha caído "probablemente más que en casi cualquier otro país europeo". Para corregirlo es necesaria "una reestructuración fundamental" de la economía que "llevará mucho tiempo", según el Fondo.

 

Lejos están los años en los que el PIB aumentaba más del 3%, según el FMI, que prevé que España siga en recesión en 2010 mientras la gran mayoría del mundo se expande y que sólo contempla la vuelta a un crecimiento del 2% en 2014, por esa pérdida de potencial.

 

En respuesta a estas previsiones, el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, ha recordado que el FMI se ha equivocado a menudo. La vicepresidenta segunda, Elena Salgado, que estará hoy en Estambul, ha dicho que hablará con los encargados de los temas de España en el organismo multilateral "para explicarles algunas cosas que no han entendido bien".

 

Prácticamente el único ámbito donde España recibe elogios del Fondo es en la supervisión de sus entidades financieras, a las que el banco central obligó a mantener más reservas en los tiempos de bonanza que otros países. Aun así, la banca se resiente de la morosidad, que se ha doblado en un año.

 

José Viñals, el director de asuntos financieros del FMI y ex subgobernador del Banco de España, pronosticó ayer que el nivel de atrasos en los pagos continuará su aumento, pero que no superará la media europea. En un encuentro con periodistas españoles, Viñals pidió "aprovechar" la crisis para reordenar el sistema bancario mediante fusiones y hacerlo más eficiente. "Dado que el negocio bancario está menguando y que hay que adaptarse a la nueva situación, en algunos casos habrá cosas que la entidad pueda hacer por sí misma y en otros habrá que llevar a cabo procesos de consolidación", explicó .

 

Mientras, en el frente presupuestario los números rojos llegarán en España este año a los dos dígitos, según Ajai Chopra, subdirector del departamento de Europa del FMI. En 2007, se registró un superávit presupuestario del 2,2% del Producto Interior Bruto (PIB), y en 2008 un déficit del 3,8%. El resultado de las cuentas del Estado dará un giro brusco debido a la recesión y a los programas de estímulo económico, a lo que el gobierno ha respondido con un alza de impuestos que entrará en vigor el próximo año.

 

Chopra afirmó que la "magnitud" del problema fiscal en España requiere esas subidas, pero recalcó que la experiencia internacional demuestra que la bajada del gasto público hace "más duradera" la mejora de las cuentas públicas. "Nosotros pondríamos más énfasis en los recortes de gastos para evitar perjudicar la frágil recuperación", dijo Chopra. El plan del gobierno prevé una reducción del 3,9% en los desembolsos públicos. En lo que no se ha entrado el Ejecutivo es en la reforma laboral que piden tanto el Fondo como el Banco de España. Ayer, Chopra resaltó que el ajuste por la crisis se siente "en despidos y no en la moderación salarial", es decir, que en lugar de limitar los sueldos las empresas responden eliminando empleos, especialmente los temporales.