RECESIÓN

El riesgo de una "generación perdida" por la crisis

El director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, advierte de que la recuperación no será tal si no se crea empleo.

Strauss-Kahn, (c), con el ministro egipcio de Finanzas, Youssef Boutros-Ghali (i) y la ministra francesa, Christine Lagarde (d).
El riesgo de una "generación perdida" por la crisis
STEPHEN JAFFE/EFE

El director gerente del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, aprovechó ayer el inicio de la asamblea anual conjunta con el Banco Mundial en Washington para tocar la llaga del lado más doloroso de la recesión, ese que afecta a millones de personas en todo el mundo que han perdido su empleo o que tienen enormes dificultades para acceder a uno.


La salida de la crisis no será tal si se trata de una "recuperación sin trabajos", una tendencia que parece clara en los países avanzados cuyas tasas de crecimiento podrían no ser suficientes para crear empleos. "Realmente afrontamos el riesgo de perder una generación", alertó el director gerente del Fondo Monetario Internacional.


Lejos de apoyarse en la leve mejoría de las principales economías prevista en 2011 para esbozar un panorama más optimista sobre el paro, Strauss-Kahn habló con la crudeza que le falta a la mayoría de los líderes políticos. "No nos engañemos, no estamos al final del túnel y para el hombre de la calle una recuperación sin empleo no significa mucho, así que tenemos que aspirar a un crecimiento sostenido, pero también a crear empleo".


La resolución de esta ecuación no se antoja fácil, sobre todo porque a los 17 millones de empleos que se perdieron durante la crisis global hay que añadir unos 450 millones más que se irán incorporando al mercado de trabajo en las próximas dos décadas.


En su opinión, el mundo afronta "un futuro muy incierto" y la recuperación en marcha es "frágil porque es desigual", rápida en el mundo emergente y lenta en el mundo desarrollado. Aunque el FMI es razonablemente "optimista" y descarta una recaída en la crisis, admitió que existen riesgos reales en el proceso de recuperación en marcha. Entre ellos destacó la elevada deuda pública que se espera se dispare al 220% en el 2014, lo que representa un incremento del 40% frente a los niveles de antes de la crisis.


Subrayó, de todos modos, que ese incremento es fruto sobre todo del bajo crecimiento, de los gastos relacionados con el riesgo en el sector financiero y la ausencia de ingresos por la crisis.


Por eso, insistió en que los programas de estímulo representan una parte muy pequeña de ese incremento de solo el 4%.


Y, el director gerente del FMI recordó, como un aviso a navegantes que el mundo fue capaz de escapar a una Gran Depresión por el espíritu de cooperación que imperó durante los peores momentos de la crisis.


Devolver los bonus

Mientras, el Comité Europeo de Supervisión Bancaria (CEBS) ha propuesto que se obligue a los directivos de las entidades bancarias a devolver los bonus que hayan recibido en caso de que se muestre que hayan cometido cualquier tipo de actividad fraudulenta o fallos significativos en la toma de riesgos.


En su informe sobre la política de remuneraciones en el sector bancario, el Comité de Supervisión Bancaria defiende que, teniendo en cuenta todas las restricciones legales y fiscales, cualquier pago de los bonus por adelantado debe estar sujeto a la posibilidad de recuperar el importe si posteriormente se demuestra que fueron resultado de actividades fraudulentas, si la compañía sufre un fuerte bache financiero o si comete graves errores en la gestión de riesgos.


Asimismo, esta institución europea incide en que debe existir una "proporción razonable" entre el salario base y los bonus a los directivos y explica que, cuando se pague una prima significativa, no debe ser abonada "en efectivo y por adelantado", sino que debe contener un componente flexible (por ejemplo acciones de la compañía, opciones y otros fondos en fideicomiso) que contemple el aplazamiento del pago según los posibles riesgos futuros.