EMPLEO

El despido supone el 76% de expedientes individuales que tramita el SAMA

2009 ha sido el ejercicio de mayor actividad en los diez años de vida de este organismo, que atendió el año pasado 7.389 reclamaciones.

La crisis ha disparado el trabajo que realiza el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) hasta niveles no vistos en los diez años de vida de este organismo, tanto en reclamaciones individuales como en colectivas. No obstante, han sido las primeras las que más se han disparado y especialmente, hasta un 76%, las motivadas por despido. Las demandas de extinción de la relación laboral, por impago, retraso en el abono de salarios o falta de ocupación efectiva, también experimentaron un gran crecimiento en 2009, pasando a representar el 8% cuando tradicionalmente solo suponían el 4%.


Y dentro de los despidos, 5.507, en sus múltiples variantes -objetivos, impugnaciones de las finalizaciones de contrato, despidos verbales o tácitos, y cierres de empresa sin previo aviso-, la mayor causa tramitada en el SAMA ha sido la del despido objetivo, que alcanzó las 2.116 tramitaciones en 2009, lo que supone casi el 40% del total cuando en el primer trimestre del 2008 apenas alcanzaba el 12%.


La razón de este incremento, según Concha Gil, gerente del SAMA, "se ve claramente: es la necesidad objetivamente acreditada que tienen las empresas de amortizar puestos de trabajo por la crisis". Sin embargo, en lo que es el despido disciplinario, la Memoria 2009 del SAMA evidencia que ha sido utilizado bastante menos que otros años.


En cuanto a los sectores más conflictivos, fueron los servicios, con 1.785 expedientes tramitados, seguido del Metal, con 1.724, la construcción y el transporte; si bien por número de trabajadores afectados, 61.406, siguieron siendo los del Metal los que mas uso hicieron del SAMA en 2009.


"Este ha sido un año de emergencia. El equipo de mediadores del SAMA ha tenido que hacer un sobreesfuerzo muy grande para atender todos los expedientes que se le han ido presentando", reconoce José María García, miembro del Patronato del SAMA en representación de la CREA. "Este servicio no fue pensado para momentos tan críticos como el actual y sin embargo, ha demostrado ser muy eficaz sobre todo por la rapidez en la respuesta a los conflictos. Sin la mediación del SAMA, las relaciones laborales en 2009 habrían sido un caos".


La actividad en el SAMA no es sino el reflejo de lo que ocurre: "Se han incrementado mucho los expedientes de despidos por causa objetiva porque muchas empresas por la crisis no pueden hacer frente al pago de salarios. Les disminuyen los pedidos y, por tanto, los gastos fijos se están comiendo a los ingresos", explica Antonio Hinojal, también miembro del Patronato del SAMA en representación de Cepyme, que confía en que este año haya menos conflictividad laboral: "Todo dependerá de cómo transcurran las circunstancias. Si seguimos con un progresivo deterioro de la actividad económica, seguiremos en la misma tónica que en 2009".


"Estamos en una situación de 'impasse', viendo si salimos o no de la crisis. Lo que creo es que toda empresa que aguante este primer semestre, aguantará la crisis y tendrá garantizada la continuidad", opina Manuel Pina, representante de Comisiones Obreras en el Patronato del SAMA. En su opinión, para afrontar lo que puede venir "sería necesario empezar a valorar más que el SAMA ha funcionado igual de bien en época de bonanza que en época de crisis. Hemos pasado de unas cifras de 3.258 despidos y 4.469 mediaciones individuales tramitadas por el SAMA en 2007 a 5.507 despidos y 7.216 mediaciones en 2009. Y eso ha sido gracias al esfuerzo de los mediadores, que han estado al límite de lo se podía tramitar. Es hora ya de dar un salto hacia adelante", afirma.


Asimismo, para Raúl Machín, miembro de UGT en el Patronato, "es importante reconocer el gran número de mediaciones que han realizado: si no hubiera estado el SAMA, se habrían colapsado los juzgados de lo social".