EMPLEO

EE. UU. destruye empleo, como ocurrió en el año 2003

Aunque el paro bajó al 4,9% en enero, se eliminaron 17.000 puestos de trabajo.

La tasa de paro de Estados Unidos se situó en enero en el 4,9%, una décima menos que en el mes anterior, aunque el empleo mostró su primer retroceso mensual desde agosto de 2003 al recortar 17.000 puestos de trabajo, según los datos publicados ayer por el Departamento de Empleo.


La pérdida de puestos de trabajo registrada en enero muestra la debilidad del empleo en el sector de la construcción y en el de manufacturas, que destruyeron 27.000 y 28.000 empleos, respectivamente.


El mercado había pronosticado que se crearían alrededor de 65.000 empleos en enero y que la tasa de paro se mantendría en el 5% registrado en diciembre.


Por otro lado, el Gobierno federal informó de que el gasto en el sector de la construcción se redujo un 2,6% en 2007, tras sufrir un descenso del 1,1% en diciembre, frente a la caída del 0,5% que había sido pronosticada por el consenso del mercado.


Asimismo, el indicador de confianza de los consumidores elaborado por la Universidad de Michigan mostró en enero un incremento por debajo de lo previsto al situarse en 78,4 puntos, frente a los 75,5 enteros de diciembre, pero por debajo de los 80,5 puntos de las estimaciones preliminares.


El presidente George W. Bush se vio obligado ayer a admitir que los últimos datos son "signos del debilitamiento de la economía" y urgió al Congreso a sacar adelante el paquete de estímulos fiscales propuesto para ayudar a la recuperación de la economía estadounidense, que se ha visto seriamente afectada por el desplome del mercado de la vivienda y la crisis de crédito en los mercados.


Los comentarios del presidente de EE. UU. se produjeron en el transcurso de una visita del mandatario a la fábrica de tarjetas de felicitación Hallmark en la ciudad de Kansas City, apenas horas después de que el Departamento de Empleo informara de que EE. UU. había vuelto a destruir empleo por primera vez en cuatro años y medio.


"Ciertamente hay algunos signos, muy serios, de que la economía se está debilitando "y debemos hacer algo al respecto", afirmó Bush.


"Cuánto antes tenga listo sobre mi mesa el paquete de medidas, mejor será para la economía del país", afirmó en referencia al plan de estímulos fiscales e incentivos valorado en 146.000 millones de dólares que fue enviado al Congreso, pero que ha visto ralentizada su aprobación en su paso por el Senado. "Los fundamentales son sólidos", dijo Bush. "Sólo estamos atravesando un momento complicado, tal y como demuestran los datos de empleo de hoy, pero tengo confianza en que sabremos salir adelante", añadió.