JORNADA DE DEBATE

Aragón no sugerirá modificaciones concretas a la reforma laboral

El director general de Trabajo, Antonio Alastrué, reconoce que hay bastantes aspectos de la reforma laboral que pueden verse modificados y que han sido criticados por sindicatos y empresarios, pero ha insistido en que su contenido actual supone un avance y contiene puntos positivos para el Gobierno de Aragón.

El Gobierno de Aragón no planteará modificaciones específicas a la reforma laboral, que está pendiente de los cambios que puedan introducirse en su tramitación como proyecto de Ley en el Congreso y que se cerrará previsiblemente antes de que finalice agosto.


Así lo ha indicado a los medios de comunicación el director general de Trabajo del Gobierno de Aragón, Antonio Alastrué, tras inaugurar una jornada de debate sobre la reforma laboral en Zaragoza, organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y Adecco, en la que participan representantes de más de 200 empresas, sindicatos, organizaciones empresariales y abogados.


En la tramitación parlamentaria, ha apuntado Alastrué, hay bastantes aspectos de la reforma laboral que pueden verse modificados y que han sido criticados por sindicatos y empresarios, pero ha insistido en que su contenido actual supone un avance y contiene puntos positivos para el Gobierno de Aragón.


En su opinión, la virtud de la reforma es su "equilibrio" al responder en parte a intereses de empresarios, y también de los trabajadores, al ampliar el fomento de la contratación indefinida a más colectivos, con lo que el Gobierno aragonés espera que una parte de la contratación temporal acaben siendo indefinida.


Ha señalado que el Gobierno de Aragón no va a plantear modificaciones concretas al circunscribirse a la negociación con otras fuerzas políticas en el ámbito parlamentario, y aunque desconoce cómo se concretarán, ha indicado que los cambios podrían referirse a aclarar más las causas del despido objetivo.


Por su parte, el presidente de la Confederación de Empresarios de Aragón (CREA), Jesús Morte, ha señalado que en España no se acaba de entender la situación por la que se atraviesa y con esta reforma se va a conseguir "bien poco", porque no va crear empleo y va a dificultar relaciones entre empresarios y trabajadores.


Así, ha opinado que después de 30 años, lo que hay que reformar es el Estatuto de los Trabajadores para que España se "modernice", se ponga a la altura de los países del entorno y deje de perder en competitividad y productividad.


La reforma, ha criticado, "habla muy poco" de productividad, de flexibilidad y competitividad, y "nada" del absentismo laboral, algo que espera que mejore en el proceso parlamentario porque el nuevo marco laboral requiere mucha más profundidad de la que tiene.


"Los empresarios estamos expectantes", ha asegurado Morte, para quien la reforma tiene como virtud que no "gusta a nadie", no es equilibrada y no es lo que necesita España porque "se queda corta".


Además, una de las "faltas graves" en los antecedes de su elaboración ha sido la posición de "privilegio" que a su juicio han tenido los sindicatos frente a los empresarios.


Sin embargo, UGT y CC. OO. rechazan frontalmente la reforma al entender que es lesiva para los derechos de los trabajadores, y contra ella han convocado una huelga general el próximo 29 de septiembre.


Por su parte, el responsable de APD en Aragón, Javier Pardo, ha opinado que la reforma, con su texto actual, se expone a "muchas interpretaciones", ha generado ciertas inquietudes sobre su tramitación parlamentaria, "cierto desasosiego" sobre la posición que van a ocupar los agentes sociales y, en los próximos meses, provocará conflictividad social.