A la caza del voto en Figueruelas

A la caza del voto en Figueruelas
A la caza del voto en Figueruelas

Siete centrales distintas concurren a las elecciones sindicales que se celebrarán este jueves en la planta automovilística de General Motors en Figueruelas para elegir a los 35 miembros del comité de empresa que representará a los más de 7.200 trabajadores de la fábrica hasta 2014. UGT, CC. OO. y CGT, los tres que obtuvieron mayor número de delegados en 2006, intentarán revalidar los apoyos de entonces, mientras otros cuatro sindicatos, OSTA, USO, Acumagme y el nuevo en estas lides SOA, reivindican espacios con el convencimiento de que sabrán defender bien los intereses de los empleados de la firma fabricante de vehículos de Opel.


UGT

La Unión General de Trabajadores llega a las elecciones del jueves, a priori, como sindicato favorito, convencido de que los trabajadores de GM habrán entendido su forma de gestionar las sucesivas crisis de los últimos años de modo correcto. En 2006, el sindicato perdió dos delegados (de trece a once), en parte porque con la merma de plantilla el comité pasaba de 37 a 35 miembros, pero también porque -como reconoció ayer mismo su cabeza de lista, Pedro Bona- "no supimos explicar bien el acuerdo del Meriva", lo que cree que no ocurrirá ahora porque en estos últimos dos años "se han alcanzado acuerdos de un valor tremendo", en referencia al reparto de producción establecido entre las plantas de Zaragoza y la alemana de Eisenach.

En virtud de esos acuerdos, firmados con el consorcio que lideraba la compañía de componentes Magna al optar por la compra (después frustrada) de Opel y que luego ratificó la dirección de GM Europa, en la plataforma de coche pequeño Figueruelas fabricará siempre el 70% del volumen total frente al 30% que correspondería a Eisenach, porcentaje que incluso mejorará después para la planta aragonesa.

Bona confía en que la plantilla sepa valorar "en su justa medida" lo que se ha hecho y reivindica el carácter dialogante de UGT, que "siempre, absolutamente siempre negocia y que trabaja por conseguir acuerdos que, una vez alcanzados, firma y defiende".

La negociación y, sobre todo, las necesarias cesiones que se dan en los procesos, pueden ser vistas de modo negativo por los trabajadores de GM que consideren que quizás UGT renuncia a veces demasiado a sus posiciones ante las presiones de la empresa. Sin embargo, en UGT asumen ese riesgo, seguros de que "decir no a todo" puede ser más fácil, pero menos responsable. Al estar en el Consejo de Vigilancia de Opel, en cualquier caso, Pedro Bona es el que mejor información tiene de los intríngulis de la compañía en Rüsselsheim, sede europea de GM, de modo que, sobre el papel, debería estar en condiciones de participar en cualquier negociación con mejor conocimiento de causa.


CC. OO.

Comisiones Obreras ha trabajado codo a codo con UGT en los últimos años para sacar adelante los acuerdos laborales más importantes alcanzados en GM España en este tiempo. Esta forma de actuar, que el sindicato valora porque ha dado más estabilidad a la planta de Figueruelas en momentos más que convulsos, podría ser rechazada por quienes en la plantilla consideren que se ha cedido demasiado en las negociaciones con Magna en un primer momento y con las direcciones de GM después. "CC. OO. ha demostrado su capacidad de gestionar la realidad", decía al respecto en días pasados Ana Sánchez, secretaria del comité, "y la plantilla debe votar tras valorar tanto ese trabajo como el que queda por hacer".

Lidera la sección sindical Chema Fernando desde que, en enero de 2009, Antonio Carvajal asumiera responsabilidades en la dirección regional de CC. OO. La candidatura de la central en GM se ha "rejuvenecido", afirman, con la inclusión de más mujeres y relevistas en la lista.


CGT

Fue la sorpresa de las elecciones sindicales de GM en 2006, al recoger los votos de muchos trabajadores descontentos que consideraron que sus intereses no habían estado bien representados por las mayoritarias UGT y CC. OO. La Confederación General del Trabajo obtuvo hace cuatro años los mismos delegados que CC. OO. (ocho) quizás porque la plantilla de Figueruelas reclamaba una postura más radical en la defensa de sus intereses.

Santiago Arcos, portavoz de la central en Figueruelas, rechaza la definición de 'sindicato del no' que muchos le atribuyen con el argumento de que "antes de decir que no siempre nos informamos bien de todo y vemos si lo que se plantea es lesivo para los trabajadores". Y añade: "No decimos no por el no, sino que lo hacemos con argumentos".

Tras reconocer que el SOA es afín a muchas ideas y planteamientos que la CGT, Arcos no ve un problema que el sindicato que ahora irrumpe en las urnas les quite algún delegado, ya que lo inmportante es defender unas ideas. "Si tienen representatividad, entre todos haremos algo", dijo.

* Mañana, los otros cuatro sindicatos en liza: OSTA, USO, Acumagme y SOA