Uno de los mayores productores de semiconductores o microchips del mndo se ha presentado hoy en Zaragoza como uno de los mercados de exportación a tener en cuenta por las empresas aragonesas. De hablar de todo su potencial se ha encargado Tony Liu, director de Taiwan Trade Center en España. 

El director general de Política Económica, Javier Martínez, ha reconocido que las ventas al mercado taiwanés apenas suponen 17 millones de euros, pero que no siempre ha sido así. "Buscar mercados fuera es necesario y es importante explicarles a las empresas aragonesas las oportunidades de un mercado todavía pequeño (supone el 01% de nuestras ventas y el 0,3% de nuestras compras"), ha dicho, destacando que "las ventas llegaron a los 200 millones de euros en 2014 cuando encontramos un producto que necesitaban como los trenes ligeros fabricados en Aragón". 

Martínez ha aprovechado para recomendar a la empresas aragonesas que utilicen el plan de licitaciones internacionales (PLI) que es una buena herramienta para salir al exterior de la mano de CEOE. 

Sobre los resultados de la exportación en diciembre, ha reconocido que aún no están los datos pero que 2023 va a ser un buen año para Aragón, mejor incluso que 2022 y que hay que seguir fomentando las ventas al exterior.

"El mercado taiwanés es un desafío", ha reconocido Daniel Álvarez, presidente de la Comisión de Inernacional de CEOE Aragón. "Los mercados fáciles ya los hemos atacado y el reto ahora es abordar Taiwán", ha señalado. "No vamos a competir en electrónica o motores, donde son líderes, pero sí podemos hacerlo en energías renovables y alimentación", ha añadido.

Ha remarcado también la necesidad de que Taiwán que está invirtiendo en hubs en Europa, en países como Alemania, elija también España y Aragón para establecer  almacenes reguladores. "Hay que intentar  atraer esa inversión para que nos ayude a crecer". 

Álvarez, director general de Pardo, fabricante de camas de hospital integrado en el grupo Pikolin, ha precisado que "no exportan a Taiwán pero si importan electrónica y motores para sus productos". Y ha insistido en la necesidad de etar más presentes en Asia y Taiwán puede ser una buena puerta de entrada.

De la crisis del mar Rojo, ha señalado que sí está afectando a todo lo que venía desde Asia sobre todo en "costes disparados" de los fletes y plazos de entrega que de por sí ya eran altos,  de diez o doce semanas, y que se han incrementado a 16 o 18. "Empiezan a ser un problema, pero parece que la foto está mejorando", ha concluido.  

Según CEOE Aragón, las relaciones comerciales entre Aragón y Taiwán son muy reducidas, suponiendo en 2023 el 0,2% tanto de las exportaciones como de las importaciones de la Comunidad Autónoma con 26, 87 millones de euros y 39,40 millones, respetivamente, hasta el mes de noviembre (último dato oficial disponible). Productos industriales y tecnología copan ambos capítulos, a los que se suman agroalimentación y bebidas en el caso de las exportaciones aragonesas