economía
Sexto año de movilizaciones de los pensionistas en Zaragoza: este es el calendario de protestas
La Coordinadora por la defensa del sistema público de pensiones (Coespe) mantiene este año las concentraciones de 'Los lunes al cierzo' en la plaza del Pilar.
Los pensionistas zaragozanos cumplirán el mes que viene seis años de protestas en la plaza del Pilar, convocados por la Coordinadora estatal para la defensa del sistema público de pensiones (Coespe), creada de la unión de varias organizaciones y movimientos sociales. El colectivo no ha fallado casi ningún lunes del año desde entonces en sus concentraciones a las 12.00, junto a la Fuente de Goya. Solo por la Navidad y otros días festivos se han visto obligados a hacer algún cambio, además del parón estival.
Este año mantienen el calendario de movilizaciones semanales, que han continuado este lunes, pese a las temperaturas invernales, en el que han sumado a sus reivindicaciones la petición de que cese la guerra de Israel en Gaza. El movimiento se suma a la manifestación de protesta contra los ataques israelíes que se celebra este sábado 27 de enero en Madrid.
Sin convocatoria en San Valero
La semana que viene la coordinadora se tomará uno de sus pocos descansos fuera del verano, ya que no habrá convocatoria el lunes 29 de enero debido a la celebración de la festividad de San Valero. La plaza del Pilar estará ocupada por el programa de actos, al ser uno de los principales espacios con actuaciones por el día del patrón de la ciudad, cuya imagen más visitada, la del escultor aragonés Pablo Serrano que preside la entrada del edificio del Ayuntamiento de Zaragoza, se encuentra contigua al lugar donde se celebran las protestas.
En febrero, el colectivo se movilizará los cuatro lunes del mes, los días 5, 12, 19 y 26. En su listado de reivindicaciones insisten en que las pensiones sean consideradas un derecho constitucional; que la subida anual de las prestaciones se haga con un índice de precios al consumo (IPC) "acumulado" y no la media que se aplica ahora; que se lleve a cabo una auditoría a las cuentas de la Seguridad Social; que se paralicen los planes de pensiones de empleo, que los consideran una vía de privatización de las prestaciones, y que no se penalice la jubilación si se han superado los 40 años de cotización.
