Los directivos aragoneses alzan la voz para mejorar en la captación y retención de talento

Los anuncios de nuevos proyectos empresariales con inversiones millonarias y previsiones importantes de contratación en Aragón contrastan con las dificultades que tienen hoy muchas empresas para hacerse con profesionales capacitados para llevar adelante nuevos proyectos. Ante esta realidad, trabajar mejor para atraer y retener talento es un imperativo, como pusieron de manifiesto quienes participaron ayer en la XIV Convención de la Asociación de Ejecutivos y Directivos de Aragón (ADEA), celebrada en Zaragoza.

Más de 1.400 directivos pasaron por la Sala Mozart del Auditorio para escuchar a ponentes de empresas de muy diferentes sectores de actividad y responsables de instituciones en una jornada titulada ‘El talento, en el centro de todo’ que incluyó la tradicional entrega de premios. «Llevamos muchos meses en los que se han anunciado grandes proyectos en la Comunidad de inversión y creación de nuevos puestos de trabajo y vemos que las empresas no pueden cubrir sus vacantes por número y perfiles profesionales», apuntó Fernando Rodrigo, presidente de ADEA, en el discurso inicial de la cita. «No queremos morir de éxito, queremos asegurarnos de que en Aragón hay talento suficiente para cubrir esas necesidades y que esos proyectos se hagan realidad», indicó.

Implicar más a las universidades y otros centros educativos para formar a personas para los puestos que reclama el mercado laboral, facilitar mejor la actividad de los emprendedores por la vía fiscal o la simplificación de trámites administrativos y la disponibilidad de servicios sanitarios y de entretenimiento son algunas de las acciones reclamadas por los directivos para hacer frente a este problema. Faltan desde carretilleros hasta ejecutivos de alta tecnología, reseñó Rodrigo. «Es un déficit en toda la cadena de valor, por ello deben estar implicados centros de FP, universidades públicas y privadas, centros de negocio o formación especializada», precisó.

ADEA innovó su formato de convención enfrentando en dos coloquios a representantes de empresas de diferentes sectores con dirigentes de la Cámara, organizaciones educativas o bancos. Los primeros plantearon iniciativas y reivindicaciones. Los segundos tomaron nota y aportaron sus puntos de vista.

Javier Cendoya, director general de Edelvives, abrió fuego con un llamamiento al asombro como generador de emoción. «El asombro atrae talento», expresó convencido. Por eso, dijo, «animo a las instituciones a asombrarnos, a ser valientes y pensar en grande». María López, directora general de Bitbrain, motivó al auditorio y arrancó muchos aplausos al comparar los (elevadísimos) sueldos que cobran los ingenieros de Silicon Valley con los de sus homólogos de Zaragoza. Lejos de aspirar a vivir cerca de San Francisco, quienes le escuchaban podían concluir que mucho mejor estamos en el valle del Ebro. Ahí la vivienda está carísima, igual que los seguros médicos o la educación de los niños, y eso hace que las diferencias sociales sean más acusadas, con más personas que no pueden pagar el alquiler, más sintecho y más delincuencia.

Responsables de Zebra, Amazon, Dinópolis, Demium, Fibrin, Tecnara, Deloitte, Adecco o el Grupo San Valero ofrecieron también propuestas interesantes. Del ámbito educativo, de impuestos, de lucha contra la burocracia, de conectividad... "En esta convención se ha resumido todo a lo que aspiran los aragoneses», apuntó al final Mar Vaquero, vicepresidenta segunda y consejera de Economía. «Nos hemos comprometido a generar un escenario fiscal más amable para el sector económico», recordó.

Los premios

Ramón Alejandro, presidente de Saica, recibió el premio ADEA Directivo de Aragón y agradeció al «extraordinario equipo humano» que lo ha acompañado durante 14 años en el puesto, en el que le relevará Susana Alejandro en julio próximo. El reconocimiento lo recogió en su nombre Enrique de Yraolagoitia, director general de la compañía.

También fueron galardonados el Hospital Miguel Servet; Natalia Romera, de Casen Recordati; Isable Pradera (Saphir), José Luis Val (Teltronic), Alberto López (Wanatop), Tomás Toribio (Operon), José Giménez (Dexis Ibérica), Mariano Lacasa (Chocolates Lacasa), Cristina Gallart (Fibrin) y José Moliner (Tarmac). El presidente de honor de ADEA, Salvador Arenere, y el anterior secretario general, José Guillén, recibieron sendos reconocimientos.