Ferrovial comenzará a cotizar en Países Bajos el viernes tras su salida de España
Culmina el plazo para dejar de operar en la Bolsa española después de que la mayor parte de los accionistas avalaran el traslado a Ámsterdam.
Apenas tres meses y medio después del sorprendente anuncio que impactó en el debate político, Ferrovial materializa esta semana su traslado definitivo a Países Bajos, donde comenzará a cotizar el próximo viernes en la Bolsa de Amsterdam.
De esta forma, la constructora propiedad de la familia del Pino dejará de ser española -al menos desde el punto de vista societario este próximo viernes a las 00.00 horas, momento en el cual la nueva matriz pasará a ser neerlandesa.
Así lo ha comunicado este lunes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tras cumplir con todas las condiciones suspensivas a las que estaba condicionada la operación y tras la aprobación por el Euronext Listing Board, el pasado 9 de junio, de la solicitud de admisión a negociación y cotización de las acciones en Euronext Amsterdam.
Una vez la empresa reciba la certificación previa a la fusión expedida por el Registro Mercantil de Madrid, está previsto que la escritura de fusión neerlandesa se otorgue el 15 de junio de 2023. Tras el otorgamiento de la escritura de fusión neerlandesa, la operación será efectiva a las 00.00 horas del día siguiente a dicho otorgamiento, de conformidad con el Código Civil de los Países Bajos, lo que supone que la fusión será efectiva a las 00.00 horas del 16 de junio de 2023, día en el que la compañía ya cotizará en España y Países Bajos a la vez.
El pasado 19 de mayo, los accionistas de Ferrovial aprobaron finalmente el cambio de sede social de la compañía de España a Países Bajos, tal y como propuso el consejo de administración en marzo y autorizó la junta de accionistas en abril de forma mayoritaria. En ese último paso de mayo, el 5,8% de los accionistas de la compañía (unos 32,77 millones de títulos bursátiles) podían ejercer su derecho de separación. Es decir, solicitar a la empresa el desembolso de sus acciones al precio acordado en el acuerdo. Sin embargo, ninguno de ellos lo solicitó con lo que se dio por hecha la operación.
El presidente del grupo, Rafael del Pino, recordó ante la junta de accionistas de abril la necesidad de realizar este traslado de sede social para poder cotizar después en Estados Unidos; para estar más cerca de los grandes inversores internacionales, que son los que controlan la compañía; y para reducir un coste de la deuda que en el caso holandés es más económico que en España.
