La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denuncia que las plantillas de la Administración General del Estado (AGE) en Aragón

están diezmadas, envejecidas y empobrecidas. Según indican en una nota de prensa, en la última década se ha reducido el personal de Administración General del Estado en Aragón un 21%. 

En los últimos años solo se está cubriendo una plaza de cada diez jubilaciones. CSIF reclama que se convoquen más plazas de oposición para reforzar y rejuvenecer las plantillas, y poder prestar un mejor servicio a la ciudadanía.

“El personal de AGE es fundamental para sostener el estado del bienestar, como se ha visto en la actual crisis sanitaria y económica. Los trabajadores de AGE prestan servicio a los ciudadanos en las materias que no están transferidas a las comunidades autónomas,

como oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), Seguridad Social, Prisiones, Tráfico, Inspección de Trabajo, Agencia Estatal de Meteorología, Instituto Nacional de Estadística, Confederación Hidrográfica del Ebro, investigación científica, Hacienda, Hospital Militar, etc.”, explica Paco Domínguez, responsable del sector de Administración General del Estado de CSIF Aragón.

Entre enero de 2020 y enero de 2010, la Administración General del Estado en Aragón ha

perdido casi 1.700 trabajadores: ha pasado de 7.860 a 6.193, según el Boletín Estadístico

del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, del Ministerio de Política Territorial y Función Pública. También se considera personal de AGE policías, militares y guardias civiles (unas 14.000 personas en Aragón).

Una administración envejecida

La Administración General del Estado es una administración envejecida: el 65,5% de los trabajadores tiene más de 50 años, cuando en 2010 era el 44,5%. Casi el 20% supera los 60 años y está al borde de la jubilación. Hay más trabajadores mayores de 60 años que menores de 40, según recoge el boletín estadístico del Ministerio (los datos de edades son del conjunto del país, no están segregados por comunidades autónomas). Destaca por ejemplo que en el Instituto Nacional de la Seguridad Social el 85,6% de la plantilla supera los 50 años y solo el 3,5% tiene menos de 40. Dentro de AGE, la plantilla más "joven" está en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), con un 40% mayores de 50 años, pero con una gran precariedad laboral.

En el CSIC el 44% de la plantilla tiene contratos temporales o son interinos. En el SEPE el porcentaje de interinos y temporales es del 24%.

“La plantilla de AGE padece especialmente los recortes de los gobiernos. Tras los recortes del Gobierno de Zapatero y la congelación salarial posterior, este personal ha sufrido una pérdida del poder adquisitivo de alrededor del 20% en la última década.

Además, hay una gran diferencia en las retribuciones respecto a las condiciones de sus homólogos de otras administraciones públicas autonómicas y locales (el sueldo es el 25% de media más bajo por el mismo puesto)”, explica Paco Domínguez.

Desde CSIF reclaman la equiparación salarial y la convocatoria de oferta de empleo público. Falta convocar la oposición de 2020, que se paralizó por el coronavirus. Es urgente convocar estas plazas, y negociar ya una nueva y más amplia oferta de empleo público para la legislatura.