Proyectos de futuro para mantener vivas las cuencas mineras

El principal problema de la descarbonización es qué hacer con las zonas donde el carbón es uno de los fundamentales generadores de empleo, por lo que es primordial que el cierre de las plantas y los planes de transición vayan de la mano.

Central térmica de Andorra
Central térmica de Andorra
Laura Uranga

“El cierre de la planta de Andorra es una decisión de estrategia empresarial en un contexto en el que la prioridad fundamental es garantizar el suministro y el empleo”. Así se ha expresado la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, tras conocer la decisión de Endesa de cesar la producción de la térmica turolense en junio de 2020, con la consiguiente pérdida de 580 puestos de trabajo directos y hasta 4.000 indirectos.

El principal problema de la descarbonización es qué hacer con las zonas donde el carbón es uno de los fundamentales generadores de empleo, por lo que es primordial que el cierre de las plantas y los planes de transición vayan de la mano. Saber de antemano dónde y en qué destinar los recursos humanos que no deberían perderse con estos cierres. En este sentido, el Gobierno de Aragón ha apostado por las fuentes de energía renovables y puesto en marcha proyectos de parques eólicos en las Cuencas Mineras. Las directrices europeas contemplan que en 2022, el 32% de la energía ha de producirse con renovables y, pese a que ahora la Comunidad Autónoma no supera el 17%, espera revertir esta situación.

Por ello, la consejería de Industria ha admitido a trámite hasta 20 proyectos en la zona para construir parques eólicos que generarán más de 622 megavatios, y que se sumarían a los ocho parques que ya funcionan. Las iniciativas afectan a más de 25 términos municipales de las comarcas Cuencas Mineras, Jiloca, Andorra-Sierra de Arcos y Bajo Aragón, y están impulsadas por Forestalia y Endesa. Según el diario 'La Comarca', la construcción de estos parques supondrá la creación de unos 500 puestos de trabajo por instalación. Pero se trataría de un empleo efímero, puesto que cuando el proyecto estuviera en marcha, las instalaciones apenas requerirán de media docena de personas para realizar las labores de revisión y mantenimiento. Por ello, es necesario invertir para que el medio rural se vea atractivo para los jóvenes, que perciban su territorio como una opción de futuro.

Por otra parte, la explotación de la leonardita parece la próxima fase de reconversión de un sector minero cuyo declive laboral ha sido constante desde finales de los años 80 del pasado siglo. Según datos de la Seguridad Social, hoy ocupa a 2.265 trabajadores en toda España, cuando hace treinta años rondaba los 45.000. Por ello, la DGA ha autorizado al principal suministrador de la térmica de Andorra a extraer 5.000 toneladas de este mineral en Teruel para utilizarlas como abono en la agricultura. Así, la empresa aragonesa Samca está trabajando en varios proyectos relacionados con la leonardita en Oliete, Alcaine y Ariño, donde se ubicará la planta que procesará estas extracciones. Si las pruebas son exitosas, podría abrirse la puerta a recolocar a parte de los mineros afectados por los cierres de explotaciones.

Precisamente, en Ariño resiste una mina donde Samca mantiene a 80 empleados directos y a otros tantos en subcontratas. En este caso, el compromiso de la empresa es el de recolocar a sus empleados en otras explotaciones como la de arcilla o la planta de fertilizantes.

El cierre de las primeras minas ya provocó la salida de muchas familias de la comarca. El IES Pablo Serrano de Andorra recibe a estudiantes de toda la zona y también de Alcorisa que cursan Secundaria y Bachiller, y FP para resto de comarcas. Este año hubo 650 matrículas en un centro que hace siete años estaba en unas 800 y que, incluso, ha llegado a superar el millar. Y el descenso de estudiantes conlleva el de profesores, y la marcha de familias conlleva el descenso poblacional y el cierre o el deterioro de servicios básicos como la sanidad. Repercute en toda la sociedad. Por ello es tan importante mantener la empleabilidad tras el cierre de la central térmica de Andorra.

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