"La Comunidad autónoma está haciendo un esfuerzo para que se vuelva a la negociación, para que se pueda volver a hablar porque nos jugamos mucho en esto", ha explicado este jueves el consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Fernando Gimeno, poco antes de clausurar una jornada sobre fiscalidad organizada por APD y Deloitte en la Cámara de Comercio de Zaragoza.

El consejero se ha pronunciado así poco antes de iniciarse las reuniones de urgencia convocadas por el Gobierno de Aragón con la dirección de Opel y el comité de empresa ante la crisis abierta en las negociaciones del convenio colectivo de la planta de Figueruelas.

 "Hay que hacer todo el esfuerzo necesario", ha dicho Gimeno, ante la amenaza de la multinacional de frenar las inversiones en la planta y llevarse el nuevo Corsa, entre otras medidas, después de que el comité suspendiera las negociaciones. El consejero ha reconocido que "al final son las empresas y los trabajadores los que tienen que decidir lo que tienen que hacer".

El objetivo del Ejecutivo autonómico con la convocatoria es "intentar que se siente todo el mundo a hablar". Ha asegurado que "el sector de la automoción está ahora muy nervioso y los trabajadores de Opel, por supuesto, también".

Por ello, ha pedido que "a ver si somos capaces de facilitar, que todo sea más fácil, aunque sabemos que es un tema difícil".

Ha señalado que la decisión se produce en un momento complicado "en un cambio de estructuración del capital de la empresa", pero ha confiado en que "hay que volver a la normalidad y saber que hay que ceder algo para poder llegar a un acuerdo".

"Ha habido momentos complicados en distintos ciclos históricos", ha afirmado, pero como diferencia ha señalado que "esta vez nos ha asustado más a todos porque no lo esperábamos. Creíamos que ya estaba resuelto todo y parece ser que no".  Ha resaltado que "la competitividad de la empresa de Figueruelas sigue siendo muy importante y hay que tomar decisiones en función de criterios económicos y razonables".

También ha esperado que haya un acuerdo el presidente de la Cámara de Comercio de Zaragoza, Manuel Teruel. La institución ve "con preocupación" la situación actual "por el impacto que tiene en el empleo en Aragón”. Por ello, ha deseado que las partes “se sienten, sean flexibles y racionales". Así, ha dicho que "la empresa, seguro que algo de recorrido tiene";  que los sindicatos "son profesionales y seguro que saben tener elasticidad" y que el Gobierno de Aragón haga el papel de "mediador" y sea capaz de "poder aglutinar ambas voluntades".

“Sería muy bueno para Aragón que Opel continuara con sus planes de inversión y que el día después nos permita reflexionar sobre políticas sobre mejora de competitividad porque la globalización tiene esto", ha pedido.

En su opinión es "el momento más delicado” de la planta porque "hasta ahora Opel competía con Opel y en España solo tenía este centro". Ahora  PSA "no sólo compite con la factoría de Vigo y el resto de las factorías europeas sino también con la expansión en el norte de África. Es una liga diferente".

“Creo que serán capaces de llegar a algún acuerdo razonable”, ha concluido.

Gimeno y Teruel participaron en la clausura de la jornada 'La fiscalidad que impacta en las empresas'. En ella, el consejero ha pedido una "cierta armonización fiscal" entre las comunidades, en línea con la que se pide desde la Unión Europea (UE).

Durante la jornada, el equipo de Deloitte explicó las novedades de este año para las empresas, en un ejercicio con pocos cambios.