Cuentan que el director general de la Cámara de Comercio de Zaragoza ha llegado al cielo desde el suelo.

Me gusta ese camino. Estudié Económicas y Empresariales en la Universidad Complutense. Me concedió una beca Sodiar (Sociedad para el Desarrollo Industrial de Aragón). En un principio, venía a Zaragoza para un año. Ya ve usted, llevo 32... Y sí, empecé desde abajo.

De becario...

Eso es. Y desde 2002 soy el director general de la Cámara.

Si un día abandona el cargo, podría dedicarse a escribir un manual de escalada...

Si un día decido escribir un libro, sería para agradecer todo lo que me ha dado la Cámara, para explicar el sentido de pertenencia, el compromiso con los valores de la institución. Trepar nunca es el camino. La clave es el equipo. Es muy difícil triunfar uno solo, triunfa el equipo.

Dicen que es la mano derecha de Manuel Teruel...

En la Cámara he conocido como presidentes a Martínez Candial, a Miguel Monserrat, a Javier Rico y a Manuel Teruel. Todos me han enseñado algo. En el caso de Manuel Teruel, al que usted se refiere, muchísimo. No es un halago gratuito: el trabajo que se está desarrollando se plasma en datos. El 75 aniversario de Feria de Zaragoza arroja unos datos que convendría estudiar para comprobar su dimensión real y su repercusión en la economía aragonesa.

Hablamos de un impacto económico en Aragón superior a los 500 millones de euros. Señor Sánchez, mucha tela marinera...

Somos el pulmón económico de Aragón. No lo digo desde la vanidad, sino desde el orgullo de Feria de Zaragoza de contribuir al crecimiento de nuestra tierra, de respaldar a la pequeña y mediana empresa. Es cierto que se genera una actividad económica de alrededor de 500 millones. Después de asumir una reconversión, perseguimos regresar a las cifras de 2008, cuando llegamos a los mil millones de euros.

Con lo pequeñita que nació la Feria en 1941...

Comenzó en la avenida de Isabel la Católica. Apenas eran 15.000 metros cuadrados. En 1986, nos trasladamos al recinto actual. Ahora son 360.000 metros cuadrados. El crecimiento ha sido exponencial. A esta Feria General del Pilar acudirán 200.000 personas. En el conjunto de ferias del año, alrededor de medio millón. La Feria ayuda a consolidar Zaragoza en el mapa español y europeo. Fitur en Madrid y la Feria del Móvil en Barcelona son certámenes de primer orden. Pero eventos en Zaragoza como FIMA o Smopyc son referencias internacionales en maquinaria agrícola y obra civil, respectivamente. Ese es nuestro reto actual, la internacionalización.

Ese anhelo de internacionalización se aprecia en el escudo de Feria de Zaragoza.

La cúpula es la bola del mundo. Las barras representan los valores de compromiso, confianza, competitividad, fortaleza, conocimiento, perseverancia, entusiasmo, felicidad...

Antes se refería a nuestra tierra, pero usted es de Salamanca...

Ya llevo mucho tiempo aquí. Me siento un zaragozano más. A Salamanca voy a ver a mis padres. Ya son mayores. Paseo, hablo con ellos... Zaragoza solo me ha restado tiempo para mis padres. Lo demás, me lo ha dado todo.