La CE y el BCE instan a España a finalizar e impulsar las reformas pendientes que son claves

Destaca la reforma de los servicios profesionales y de las asociaciones profesionales, que, si fueran adoptadas, "beneficiarían a toda la economía" española.

Draghi
La CE y el BCE instan a España a finalizar e impulsar las reformas pendientes que son claves

La Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) instaron este lunes al Gobierno español a acabar las reformas en curso e impulsar ya algunas aún pendientes que son consideradas claves, como la de los servicios profesionales.


"Las reformas pendientes tienen que ser ahora finalizadas, como la ley de unidad de mercado, o deberían ser complementadas con medidas adicionales para hacer frente a la segmentación en el mercado laboral", señalaron ambas instituciones en sus conclusiones preliminares de la tercera misión de supervisión posterior al programa de asistencia financiera para la banca española.


Para la CE y el BCE, que visitaron España del 12 al 18 de marzo, "hay demoras notables en la implementación y riesgos derivados de la necesidad de un rendimiento común en los diferentes niveles de Gobierno".


Asimismo, señalan, existen "algunas reformas claves pendientes", tales como la reforma de los servicios profesionales y de las asociaciones profesionales, que, si fueran adoptadas, "beneficiarían a toda la economía" española.


La CE y el BCE observan "progresos adicionales" en los últimos meses en el campo de las reformas y citan las de la administración, la educación y el marco para insolvencias, entre otras, a la vez que mencionan iniciativas para apoyar la integración en el mercado laboral y luchar contra la dualidad, y mejorar las políticas activas, que aún no han desarrollado plenamente sus resultados.


No obstante, advierten de que "permanecen importantes desequilibrios" en la economía española, por lo que la "completa y eficaz" implementación de la agenda de reformas y su reforzamiento "son primordiales" para sostener la recuperación, el mayor reequilibrio de la economía y el mantenimiento de la prima de riesgo en cotas bajas en lo sucesivo.


Entre otras cosas, las instituciones consideran que hace falta un "ajuste más pronunciado" en la cuenta corriente para reducir la elevada tasa de pasivos externos, así como seguir impulsando el desendeudamiento del sector privado.


El acceso al crédito, en particular para los hogares y compañías más sanas, incluidas pymes, con perspectivas positivas de crecimiento, "ha mejorado de manera importante", y la creación de empleos "se ha acelerado".


Sin embargo, el desempleo, y sobre todo el paro juvenil y el de larga duración, "siguen siendo muy elevados", al igual que la segmentación en el mercado laboral, recuerdan.


Asimismo, la deuda pública sigue aumentando, por lo que situarla de nuevo en el límite del 60% del PIB "requerirá esfuerzos fiscales continuados a largo plazo", señalan.


En el sector financiero, en el cual algunos bancos se beneficiaron de una ayuda de 41.333 millones de euros de los socios de la eurozona en el marco del rescate bancario, la CE y el BCE destacan la mejora de la calidad de los activos, la mayor solvencia y liquidez y el regreso a los beneficios de la banca.


Eso sí, advierten de que las señales de mayor estabilización no son uniformes y afirman que, mientras que se han rebajado los costes de financiación en un entorno de bajos tipos de interés y se ha disminuido el aprovisionamiento al tiempo que se han reducido los créditos morosos, el volumen de créditos sigue "contraído".


La mayoría de los planes de reestructuración de los bancos con ayuda financiera están logrando los objetivos establecidos y bien avanzados, y la venta de participaciones públicas ha progresado.


"Completar la reestructuración y privatización de bancos controlados por el Estado es necesario para devolver al sector a una senda sostenible a largo plazo", señalan la CE y el BCE.