El FMI pide abaratar la contratación y revisar salarios mínimos para reducir el paro

El Fondo reclama soluciones "multifacéticas" que incluyan reformas en el mercado laboral.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reclamado soluciones "multifacéticas" para intentar reducir el elevado desempleo juvenil en la zona euro, entre ellas reformas laborales que abaratar la contratación, reducir la dualidad del mercado laboral y reconsiderar la políticas de salarios mínimos.


En un informe, un grupo de expertos del FMI subraya que los trabajadores jóvenes son "más o menos tres veces más sensibles" a los cambios en la actividad económica que los adultos porque sus condiciones de empleo son más frágiles.


Así, incide en que esto algo especialmente relevante en las economías más vulnerables de la región, donde el empleo juvenil está concentrado en sectores más susceptibles al ciclo económico, como la construcción, y en las pequeñas y medianas empresas.


En este contexto, el informe recalca que es necesario un "sólido crecimiento" en la eurozona para fomentar el empleo juvenil, pero advierte de que éste "no puede solucionar el problema por sí solo", especialmente teniendo en cuenta que el paro entre los más jóvenes ya era alto antes de la crisis.


Por ello, propone una serie de reformas del mercado laboral que pueden ayudar a reducir el desempleo juvenil, como, por ejemplo, abaratar la contratación para estimular la demanda de mano de obra y reducir así el desempleo.


En particular, cree que podría ser útil que los salarios mínimos se fijen teniendo en cuenta otros sueldos en el país. "Como poseen relativamente menos experiencia y aptitudes, los trabajadores jóvenes probablemente reciban el salario mínimo, y si su remuneración es alta en comparación con el resto de la fuerza laboral es posible que no consigan empleo", explica.


Asimismo, también insta a las autoridades a intentar reducir la dualidad del mercado laboral retirando las protecciones a los empleos permanentes, algo que "exacerba el desempleo juvenil" porque los trabajadores jóvenes tienden a tener contratos temporales y escasa protección laboral.


Por otro lado, también defiende que la formación vocacional encaminada a mejorar las aptitudes y unas políticas laborales activas bien concebidas y eficaces en función de los costes que busquen dar respaldo a los desempleados y ayudarlos en la transición al mercado laboral también pueden moderar un desempleo juvenil elevado.


"Un problema complejo exige una solución compleja. La respuesta al elevado desempleo juvenil radica en hacer arrancar el crecimiento económico y poner en marcha reformas del mercado laboral", recalca que el Fondo, que aboga por "soluciones multifacéticas".


En su opinión, esto incluye apoyar la inversión privada mediante una política monetaria acomodaticia, un esfuerzo concertado para sanear los balances bancarios e impulsar el crédito, un aumento de la inversión pública en los países que pueden permitírselo y un amplio abanico de reformas en los mercados de productos y de trabajo.La crisis y el desempleo juvenil

El Fondo señala que el menor crecimiento económico en la zona euro debido a la crisis financiera explica la mitad del aumento del desempleo juvenil en la región, cifra que aumenta al 70% en el caso de los países más vulnerables de la región (Chipre, Grecia, Irlanda, Portugal y España).


En este sentido, señala que la cifras de paro juvenil en la eurozona son "dignas de los titulares de los periódicos", ya que actualmente apenas cuatro de cada diez trabajadores de entre 15 y 24 años está empleado en los países más vulnerables. "Y si la recuperación de la zona euro se enfría, estas cifras pueden volver a crecer nuevamente", advierte.


El FMI agrega de que esta situación puede ser "especialmente problemática" en la zona euro, cuya población está envejeciendo y adolece de un gran volumen desaprovechado de trabajo y capital. "Y cuanto más se prolonga el desempleo, más se deterioran las aptitudes y las condiciones para obtener trabajo y más corrosivos son los efectos en las instituciones y la cohesión social", incide.


En este contexto, alerta de que sin una fuerza laboral joven dinámica, las economías no pueden permitirse financiar las redes de protección social y quedan expuestas a pérdidas de innovación y competitividad, así como a una contracción del potencial de crecimiento, "especialmente si los jóvenes con más talento optan por estudiar y trabajar en el exterior".


Por otro lado, el FMI remarca que es fácil achacar esta "peligrosa situación" a la crisis financiera, pero recuerda que países como Grecia, España, Portugal, Italia o Francia tenían tasas de desempleo juvenil "persistentemente por encima" de la media antes de la crisis.