Torrero, un barrio con calles que recuerdan su historia

Un rincón de Zaragoza que conserva en el trazado de las calles su esencia de barrio obrero.

Imagen de archivo de la cárcel de Torrero
Cárcel de Torrero y viviendas del barrio

A finales del siglo XIX los montes de Torrero eran uno de los lugares elegidos por los zaragozanos para pasar sus vacaciones. La suficiente lejanía al centro de la ciudad le otorgaba el estatus ideal de zona de recreo y esparcimiento. Un área que hoy se une bajo el nombre del distrito de Torrero y que alberga el barrio del mismo nombre, La Paz, San Antonio y Pinares de Venecia.


La principal fuente económica del barrio eran las canteras de yeso, cuyos trabajadores comenzaron pronto a trasladarse a vivir a la zona. Un lugar, a comienzos del siglo XX, que solo estaba conectado al resto de la ciudad por el puente de América, la única pasarela sobre el Canal Imperial.


Además, entre las canteras y las fábricas de yeso, discurría un pequeño ferrocarril de vía estrecha que las conectaba, así como con la fundición y el polvorín militar. Otro transporte que podía verse entre semana eran las grandes barcas que navegaban por el Canal cargadas de productos agrícolas, en gran medida, y que los fines de semana dejaban paso a unas bonitas góndolas que hizo que dicho sector comenzara a denominarse como Venecia. 


Siempre ligado por su nombre al cementerio y la antigua cárcel, Torrero ha renacido como un barrio en el que se combina el comercio minorista, los supermercados, y lugares de ocio como el centro comercial Puerto Venecia. Además, cuenta con zonas verdes como los pinares del Monte de Torrero para hacer el día a día mucho más agradable.