El 84,7% de los trabajadores de restaurantes de Aragón no se sienten bien formados

El 84,7 por ciento de los trabajadores en restaurantes de Aragón no se consideran suficientemente formados para sus tareas y el 82,3% reconoce que necesitaría mejorar su formación en habilidades relacionadas con el trato con personas.

Estas son algunas de las conclusiones que se desprenden del estudio titulado 'Evaluación y prevención de riesgos psicosociales en hostería en Aragón' realizado bajo la dirección del profesor de Psicología de la Universidad de Zaragoza Santiago Gascón.

El informe, que ha contado con apoyo del Gobierno de Aragón y la Unión Europea, revela que estas cifras son menores entre los trabajadores de hoteles, sector en el que, sin embargo, un 39,4% reconoce que necesitaría formarse en habilidades relacionadas con el trato con personas.

En el estudio participaron 38 establecimientos distintos de la Comunidad aragonesa, 15 hoteles y 23 restaurantes de diferente tamaño.

Según el profesor Garzón, la falta de formación es "una fuente de estrés", toda vez que especifica que "esto se da sobre todo en empresas pequeñas, donde el trabajador debe realizar varias tareas distintas".

A su juicio, el empleado "se ve sobrepasado porque no dispone de las capacidades necesarias, siente que no está a la altura de su puesto, y eso genera estrés".

La realidad es diferente si se analizan los centros por separado siendo los más vulnerables los pequeños establecimientos en los que el trabajador debe asumir "diversas multitareas", señala el estudio.

Asimismo se observa que en las grandes cadenas se promueven internamente programas para la formación de sus empleados.

Además de la necesidad de formación, otro de los elementos generadores de estrés es la "la falta de recompensas", sobre todo en las personas que no están de cara al público; por ejemplo, los cocineros, a quienes solo les llegan quejas y nadie felicita si la comida está buena.

Sin embargo, Gascón destaca que contrariamente a lo que esperaba, la sobrecarga de trabajo, que sí es un elemento de estrés en otros sectores laborales (como sanidad o educación), "no lo es en hostelería", ya que los trabajadores de este sector saben manejar sin agobios la acumulación de público o su falta de control sobre el trabajo.

Otro problema al que se enfrentan estos profesionales es a sus complicados horarios, que no les permiten una formación continuada, por lo que los cursos a través de Internet se convierten en el mejor método para que estos trabajadores en activo puedan mejorar su capacitación y actualizar sus conocimientos de acuerdo a su disponibilidad de tiempo.

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