Los empleados de Sitel en Zaragoza se han concentrado este miércoles para contra el despido de la plantilla, 50 trabajadores, en el último día de negociaciones del expediente de extinción presentado por la compañía, dedicada al telemarketing y servicios de gestión de relaciones con clientes.

Ante la sede de Endesa, uno de principales clientes de Sitel, los empleados han desplegado una pancarta con el lema 'Por la defensa de los derechos de los trabajadores', en un último intento de evitar los despidos ante la decisión de la empresa de cerrar su centro de la capital aragonesa y desplazar el trabajo hacia otros centros en España.

Así lo ha explicado el secretario de comunicación de la federación de Servicios Financieros y Administrativos Comfia-CC. OO., Gerardo Montori, quien ha lamentado que la negociación con la empresa ha sido "virtual" y que ésta ofrezca a los empleados, fundamentalmente mujeres con una antigüedad media de siete años y salarios de alrededor de 700 u 800 euros al mes, lo mínimo que marca la reforma laboral, 20 días por año trabajado.

"Estamos luchando hasta el final por mantener los puestos de trabajo", ha subrayado por su parte Beatriz Paico, delegada en el comité de empresa por CC. OO., quien ha afirmado que la reunión de este miércoles, en Madrid, es la última oportunidad de lograr un acuerdo con la dirección.

Montori ha asegurado que el cierre parte de la decisión de Endesa de eliminar el trabajo en Zaragoza y desplazarlo a otras provincias, de forma que Sitel presentó un ERE de extinción por motivos organizativos, no económicos, cuyo plazo de consultas finaliza el lunes.

"Ellos prefieren reorganizar la empresa y no tener trabajo en Zaragoza", ha insistido Montori, quien ha reiterado que la principal reivindicación de los trabajadores es el mantenimiento del empleo o una salida "digna", que ronde los 30 días por año.

Ha criticado que Sitel haya decidido no desplazar a Zaragoza trabajo derivado de otros clientes y ha acusado a la compañía de actuar con "mala fe" al optar por mantener centros de trabajo más grandes, como los de Madrid o Barcelona, que superan los mil trabajadores.