La semana económica

El abismo fiscal y otras noticias

 Los últimos días de cada año y los primeros del siguiente siempre están cargados de deseos de felicidad y buenos augurios, aunque en este caso la transición de 2012 a 2013 parece que sólo trae malas noticias, sacrificios "inevitables", subidas de precios y el ya inminente y temido "abismo fiscal" en EEUU.


Barak Obama apura las últimas horas del año para cerrar con los Republicanos un acuerdo que frene el llamado "abismo fiscal", un compendio de subidas de impuestos y recortes masivos del gasto público a partir del 1 de enero, que de producirse podría colocar a la economía estadounidense en recesión.


Las posturas de Demócratas y Republicanos parecen haberse acercado algo en las últimas horas, pero no lo suficiente. Y ya sabemos que en estos momentos de crisis, un estornudo de EEUU puede suponer un resfriado en toda regla para el resto del mundo.


En su comparecencia de balance anual, el presidente Mariano Rajoy agradeció que la sociedad española haya aceptado los sacrificios "necesarios e inevitables" que ha provocado la crisis y precisó que pese a que el Gobierno no pretende nuevos recortes o subidas impositivas, todo dependerá de la evolución de nuestra economía.


Señaló Rajoy, eso sí, que 2013 será todavía difícil para los españoles.


Y esas nuevas dificultades empezarán ya el próximo 1 de enero con la habitual subida de precios en productos y servicios básicos, como la luz, el agua o los transportes, que, en la mayoría de los casos, superarán a la revalorización de pensiones y salarios.


La luz subirá una media del 3 %; los peajes de autopistas, entre el 2,4 y el 3,5 %; los trenes, otro 3 %; las tasas aeroportuarias, un 6,3 %, y Correos, un 2,95 %. A estas subidas habrá que unir los incrementos de los precios que realizan los municipios en las tarifas de agua, transporte urbano o IBI, entre otras.


Entre las pocas buenas noticias, el gas, dado que el natural y el butano congelan sus precios.


Mala semana para los consumidores y también mala para los inversores, sobre todo los de Bankia, que han visto cómo el valor de sus acciones se desplomaba casi un 42 % en la semana tras conocerse la valoración del FROB, que concede a esta entidad un valor patrimonial negativo de 4.148 millones.


Esta valoración pone en peligro la inversión de 350.000 pequeños accionistas que compraron títulos en su salida a bolsa. De momento, Bankia abandonará el Ibex-35 el 2 de enero, a la espera de que acabe su recapitalización.


Y de la bolsa, pues casi ni hablar, ya que la española se encamina, a falta de sólo una sesión, a cerrar 2012 en números rojos, frente a las ganancias -algunas más que considerables- que se anotarán los grandes mercados mundiales.


Fráncfort ha ganado casi un 30 por ciento en el año y los parqués de Tokio y Hong Kong, un 23 por ciento en ambos casos, en tanto que el tecnológico Nasdaq y la Bolsa de París avanzaban en torno al 14 por ciento, y Londres, Nueva York y Milán se anotan subidas del 6 por ciento.


Todas en positivo, mientras que el Ibex-35, a falta de la sesión del lunes 31, pierde un 5 %. Bien es cierto que el mercado español ha remontado desde el verano, pero, a la postre, el resultado es más bien desalentador.


En los primeros días del año conoceremos nuevos datos de paro, afiliación, IPC y matriculaciones, con expectativas poco positivas, y entrará en vigor la reforma de las pensiones que alargará progresivamente la edad de jubilación.


Pues con todo, hay algunos que todavía están de celebraciones y el mismísimo 1 de enero la UE conmemorará el vigésimo aniversario de la entrada en vigor del mercado único europeo.


Y es que por muy mal que vayan las cosas, siempre hay algo por lo que brindar... ¡Feliz 2013!