El Gobierno ha declarado que en este momento no hay negociaciones con la Comisión Europea sobre un posible rescate a España. Se ha desmarcado así de los rumores que señalaban que el Ejecutivo pediría un rescate en las próximas semanas. Bruselas ha confirmado las afirmaciones del Gobierno, asegurando que no ha recibido ninguna petición de ayuda de España.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este viernes con rotundidad que actualmente "no hay negociaciones en curso sobre ningún programa (de asistencia) para España" más allá del rescate bancario ya pactado con la Comisión Europea.

"Por si hubiera algún género de dudas, no hay negociaciones en curso sobre ningún otro tipo de programa para España. Lo dice el portavoz de la CE y se lo confirmo yo", ha insistido la vicepresidenta.

Asimismo, ha apuntado que la situación actual es "la misma" que existía a principios de mes, y ha recordado que el propio presidente, Mariano Rajoy, señaló hace unas semanas que no se tomará ninguna decisión hasta conocer qué medidas autoriza el Banco Central Europeo en relación con la deuda soberana, si bien Sáenz de Santamaría ha negado tener conocimiento sobre el calendario que manejaría el organismo emisor.

En efecto, el portavoz de Asuntos Económicos y Monetarios del Ejecutivo comunitario, Simon O'Connor, ha asegurado que "no hay negociaciones en marcha para otro ningún otro tipo de programa para España".

"Para que haya negociaciones y discusiones para cualquier otro programa se necesita que haya una petición del Estado miembro y no se ha producido ningún petición se ha recibido de España para tal programa", ha aclarado.

El portavoz sí ha reconocido en cambio "constantes discusiones en marcha a todos los niveles, ministerial, técnico... sobre la respuesta a la crisis, a la situación en los mercados" tras el anuncio de Draghi de condicionar toda intervención del BCE para apoyar a los países sometidos a una fuerte presión en los mercados a que éstos pidieran antes el rescate.

"Hay actividades en un número de frentes, pero lo que no está en marcha es ningún tipo de discusión sobre un programa de apoyo particular para España", ha recalcado, desmintiendo de nuevo la información publicada por Reuters.

"Ya hay un Memorando acordado con España sobre asistencia financiera del EFSF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera) para recapitalizar el sector bancario de España", ha recordado el portavoz comunitario.

"Nosotros y las autoridades españolas estamos plenamente centrados en la aplicación de ese programa sectorial. Hay un programa para España que se está implementando ahora. Hay un trabajo importante que se está haciendo para cumplir los requisitos del Memorando de Entendimiento con las autoridades españolas en estrecha consultación", ha precisado O'Connor. "Aquí es donde se centra nuestro trabajo", ha recalcado.

Fuentes diplomáticas europeas explicaron ayer a Europa Press que el Ejecutivo comunitario ha mantenido contactos con el Gobierno español sobre cómo se pondría en marcha "en la práctica" un eventual rescate de España para la compra de bonos de deuda con los fondos de rescate europeos.

Por su parte, la agencia de calificación crediticia Fitch ha afirmado este viernes que la solicitud a la UE por parte del Gobierno español de asistencia financiera adicional no implicaría una acción negativa sobre el rating soberano de España.

la calificadora de riesgos explica que estas compras de bonos soberanos por parte de los mecanismos de rescate, especialmente si viniera respaldada por compras en los mercados secundarios por parte del BCE, reduciría significativamente el riesgo de una crisis de liquidez autoinducida y ayudaría al Gobierno español a conservar el acceso a los mercados, aliviando la presión sobre el rating de España.

"Este apoyo externo proporcionaría a España el respiro necesario para aplicar sus ambiciosas reformas fiscales y económicas", defiende Fitch, que considera que la naturaleza condicional de este apoyo ayudaría a mejorar la credibilidad del esfuerzo de consolidación y reformas en el país.

"Rendido al rescate, dividido y agotado"

La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha expresado el temor de su partido a lo que pueda estar negociando el Gobierno con "los hombres de negro" de la Unión Europea de cara al rescate que se vaya a pedir en las próximas semanas, vistos los antecedentes, ha dicho, y ha advertido de que la sociedad española "no puede más".

"El rescate bancario iba a ser sin condicionalidad y desde entonces, no hemos parado. Creo que el desahucio exprés tiene que ver con eso", ha denunciado en rueda de prensa tras la primera reunión de la comisión permanente de la Ejecutiva socialista. "Las decisiones siempre afectan a los mismos, las clases medias, trabajadores, jóvenes, inmigrantes. Da mucho susto pensar qué pueden estar negociando", ha recalcado.

La dirigente socialista ha dicho que el Gobierno está "rendido al rescate", además de "desorientado", "dividido" y "agotado" ocho meses después de llegar, aunque ha reiterado que su partido desconoce qué está negociando con las instancias europeas, por lo que no puede asegurar si el rescate es inevitable. "Hay muchísimas cosas que ya han hecho mal y de aquellos polvos, estos lodos. Errores que han fragilizado enormemente la confianza en España", ha advertido.

Valenciano ha criticado que ninguna de las medidas que va tomando el Gobierno va en la dirección de estimular la economía, ni tampoco el Ejecutivo se preocupa por exigirlas en Europa, ha dicho. Así, ha instado al presidente, Mariano Rajoy, a trabajar en las instancias europeas para exigir que las anunciadas medidas para reactivar la economía se empiecen a poner en marcha.

Por su parte, CC.OO. ha declarado que aceptaría el rescate a España a través de la compra de deuda pública en los mercados primarios por los fondos de estabilidad financiera de la UE "si no se imponen nuevas condiciones macroeconómicas del estilo de las que contiene el memorándum para la concesión de la ayuda para el sector bancario".

El sindicato cree que esas condiciones llevaron "al insoportable y contraproducente último ajuste de 65.000 millones de euros del Gobierno de Rajoy". No obstante, para la organización "es difícil imaginar que los talibanes del ultraliberalismo conservador, hoy instalados en Frankfurt, Berlín y Bruselas, permitan esa compra de deuda sin condiciones en el mercado primario".