Desalojan a una familia en La Coruña tras un largo encierro y una multitudinaria protesta

Desde el Ayuntamiento de la ciudad aseguran que solo cumplen con "la ley".

Desalojan a una familia en A Coruña tras un largo encierro y una multitudinaria protesta
Desalojan a una familia en La Coruña tras un largo encierro y una multitudinaria protesta
Calabar

La familia de Álvaro Corral e Isabel Vázquez se ha quedado este jueves sin su vivienda en el barrio coruñés de Elviña por el proyecto del Parque Ofimático, tras un encierro que empezó en la noche de este jueves y concluyó al mediodía de este jueves mientras decenas de personas protestaban en el exterior ante un amplio dispositivo policial.


A las 9.00 horas de este jueves se terminaba el plazo de la orden de desalojo de esta casa situada en el acceso desde Alfonso Molina al campus de Elviña de la Universidad de La Coruña, aunque una veintena de personas se encadenó anoche en su interior.


El amplio despliegue policial, de en torno a un centenar de agentes de la Policía Local -que procedió al desalojo- y Nacional -que sirvió de apoyo-, se desplegó desde la madrugada de este jueves, pues a las 6:00 ya estaban todos los accesos a pie y en coche cortados con un perímetro de seguridad establecido.


Las campanas de la iglesia de Elviña sonaron a rebato desde la madrugada para anunciar la alarma y las largas retenciones todavía continuaban desde primera hora, cuando los agentes y las funcionarias de la Concejalía de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, que dirige Martín Fernández Prado, accedieron al domicilio.


El portavoz del BNG en La Coruña, Xosé Manuel Carril, fue desalojado junto con varios activistas de Stop Desahucios tras haber dormido en el interior de la casa y tan solo quedaban seis personas dentro cuando llegó la comisión judicial.


El bombero Roberto Rivas, sancionado tras haberse negado a desahuciar a la octogenaria Aurelia Rey, se encadenó en el tejado junto con Adolfo Naya, de la CIG, y una activista llamada Antía.


Debajo de ellos se encerraron en una habitación pensada para evitar que nadie pudiese acceder desde el interior de la vivienda Álvaro Corral, su hijo y el abogado Manuel Vázquez.


Ya desde las 9:00 se empezaron a derribar los muros y varias instalaciones anexas a la casa, que terminó siendo demolida a primera hora de la tarde de este jueves, mientras en el otro lado de la avenida se tiraba la vivienda de José Devesa, el otro desalojado de este jueves que ya anunció que no pensaba luchar.


Los primeros incidentes llegaron cuando varias personas intentaron cortar la carretera, aunque la Policía lo impidió, igual que cuando intentaron dejar un contenedor en medio de la avenida de Alfonso Molina.


Cuando la multitud intentó acceder a una finca cercana para mostrar su apoyo a los encerrados también hubo momentos de tensión con la Policía, con al menos dos heridos, que coincidió con el lanzamiento de varios petardos.


En torno a las 12.30, la Policía Nacional despejó esta finca para alejar al centenar de personas concentradas, entre las que estaban el concejal de Esquerda Unida César Santiso o el escritor e integrante de la Marea Atlántica Manuel Rivas, justo cuando una grúa alquilada subió a dos agentes locales al tejado.


Deberían haber sido los bomberos los encargados de este trabajo, pero su negativa a acudir obligó a contar con esta otra maquinaria, que subió en total a cuatro policías locales, en dos tandas, que más tarde sacaron a los seis encerrados sin detener a ninguno y empezaron los trabajos para derribar la vivienda.


Desde el Ayuntamiento de La Coruña aseguran que cumplen "la ley" y el alcalde, Carlos Negreira, dice que no quiere "desalojar a nadie hasta que los terrenos sean necesarios para la obra", como dice que es este caso en el que está proyectado un puente de lado a lado de Alfonso Molina que pasa por la parcela.


Culpa al anterior Gobierno local de la realización del Ofimático y añade que la familia desalojada tendrá diez o doce viviendas, según su tamaño, cuando se termine el citado proyecto, dado que se han convertido en promotores.


Por su parte, Carril sostiene que "estaba en la mano del señor Negreira parar el desahucio de la familia del Ofimático, excluyendo del sector las casas y los terrenos afectados por el puente, para lo que habría que modificar el Plan General de Ordenación Municipal y el plan parcial".


Desde el PSOE denuncian que "el desalojo pone de manifiesto la incapacidad de Negreira para gestionar la ciudad" y apuntan al regidor como "el primera alcalde que deja a una familia en la calle".