CAI ZARAGOZA

Yo te conozco bien, tú me conoces bien...

Chus Mateo va conociendo a sus jugadores, Joaquín Ruiz le conoce bien, y Cabezas y Phillip conocen a la perfección el Martín Carpena.

El duelo entre malagueños y zaragozanos va a depender mucho del grado de conocimiento entre los protagonistas. No en vano muchos de los allí presentes se conocen a la perfección entre ellos, las situaciones que se viven en un partido de estas características, el ambiente de un pabellón como el Martín Carpena, a capacidad de sorprender desde los banquillos... Yo te conozco bien, pero tú también me conoces bien. Un arma de doble filo.


Porque hoy debuta Chus Mateo en la ACB al frente del Unicaja y probablemente haya pocos técnicos que le conozcan mejor que el que fue su segundo en Zaragoza hace unas cuantas campañas, Joaquín Ruiz Lorente. Tienen una buena relación, pero eso no quita para que el entrenador ayudante del CAI sepa cuál es la forma de dirigir de Mateo, sus variaciones tácticas, su forma de preparar los encuentros y de estudiar a los rivales. Esa una baza a favor de los aragoneses, ya que además de haber visto a su rival el pasado jueves en Euroliga y haber tomado nota de las novedades, cuentan con un 'espía' de lujo que ha compartido vestuario con el técnico adversario.


También el grado de conocimiento que haya adquirido ya Chus Mateo de sus nuevos pupilos dependerá de cuánto pueda 'exprimirles' sobre la cancha. Para empezar, el madrileño ya ha insistido en la intensidad como factor clave para que el conjunto vaya hacia arriba. Quiere que sus hombres rindan a un alto nivel 40 minutos, algo que no cree que pueda ocurrir desde ya.


Y quién mejor que Carlos Cabezas o Darren Phillip para conocer el ambiente que se respirará hoy en el Martín Carpena. Ellos han 'mamado' la afición del Unicaja y saben cómo pueden reaccionar los seguidores andaluces en un momento de tantos cambios en su club y si un duelo como este se les complica en el tramo inicial, algo que podría facilitar la labor a los hombres de Abós.


El base formado en el Unicaja reconocía ayer que es la primera vez que va al Carpena como rival, aunque no va a poder jugar. Su condición de malagueño le ha hecho viajar con la expedición rojilla, aunque más como apoyo moral que otra cosa. Cabezas confía en que la grada le reciba con cariño.


El otro que ayer regresaba a la estación María Zambrano de Málaga, curiosamente con el mismo gorro con el que viajaba a la capital malagueña hace un par de años, era Darren Phillip. Aquí se siente como en casa y esta vez tiene una oportunidad de demostrar su valía. La duda de Aguilar, que ayer probó su tobillo por la tarde y hoy volverá a hacerlo poco antes del encuentro, aunque no pinta demasiado bien, otorgará al británico más minutos en cancha y la opción de brillar ante su ex.


Todos son viejos conocidos, todos saben cómo actúa el rival y todos quieren ganar en el arranque de esta segunda vuelta. Unos están más necesitados que otros y eso afecta. Quizá alguno no se comporte como espera el adversario. Esas sorpresas dan una baza extra.