ENTREVISTA

Víctor Muñoz: "Si sales a defender, te matan"

Histórico en el Barcelona y en el Real Zaragoza, Víctor Muñoz traza la pauta a seguir por el club aragonés para puntuar en el Camp Nou. Ya lo consiguió la pasada campaña con el Getafe.

Víctor Muñoz, cuando entrenaba al Zaragoza.
Víctor Muñoz: "Si sales a defender, te matan"

Se hace raro no verle en un banquillo.

Ninguno de los equipos que me ha llamado me ha parecido interesante. He tenido varias ofertas, sobre todo del extranjero, pero ninguna me ha convencido. Me conformo con hacer alguna colaboración con medios de comunicación (Gol TV).

¿Cómo lo pasa alguien tan fanático del trabajo a pie de campo?

Habituándome a esta nueva vida pero sin perder la calma ni la serenidad. Las plazas para entrenar en Primera División siempre están limitadas y en otras ligas no puedes ir a cualquier sitio.

El próximo domingo se enfrentan Barcelona y Zaragoza. ¿Ve a los aragoneses sentenciados de antemano?

El Zaragoza no tiene nada que perder. Si se hacen las cosas bien, tienen unas pocas posibilidades. Jugar en el Camp Nou contra el mejor equipo del mundo es motivador para los jugadores. Sabes que si te ganan, no pierdes credibilidad.

Los tres últimos partidos del Barça abren una esperanza.

En estos partidos el Barça ha perdido el 'punch' y la eficacia. No ha mostrado la capacidad de juego que exhibió la pasada temporada, con una regularidad tremenda. Acaba de perder en Champions y en la Liga viene de un empate frente a un Valencia muy entonado. Contra el Almería pudo y debió ganar con más ventaja, tanto por el juego como por las ocasiones. Es cierto que ha perdido lucidez pero es que lo del año pasado era sobrehumano. Aún así, es líder en todas las competiciones y le han marcado muy pocos goles.

La pasada campaña arrancó un empate del Camp Nou con el Getafe.

Hicimos un buen partido, plantando cara al gran Barça con argumentos futbolísticos. Incluso pudimos ganar.

Salvo Ibrahimovic, el resto del equipo es el mismo. ¿Se puede aplicar algo de su receta?

Lo básico es no jugar únicamente a defender porque entonces estás muerto. Tarde o temprano, te cae el chaparrón. Hay que atacar e intentar hacer daño al Barça cuando tienes el balón. Hay que tratar de no jugar dentro del área porque Ibrahimovic es letal. Otro aspecto es actuar como equipo, con continuas ayudas.

¿Qué le sugiere el marcaje al hombre que dispuso Hugo Sánchez sobre Xavi?

Le puso uno a Xavi, otro a Iniesta? Se dio la casualidad de que perdió por 1-0, pero no creó ninguna ocasión de gol. Perdieron por uno y lo celebraron? Yo creo que no es para estar contento caer de esa forma tan rácana.

Más allá del domingo, ¿dónde sitúa la meta exigible a este Real Zaragoza?

El objetivo principal es la consolidación del equipo en Primera. No deben salirse de eso antes de tiempo. Después de pasar un año malo y sufrir mucho para subir, lo importante es ganar tranquilidad. Es el momento de ir consolidando a jugadores que serán importantes en el corto y medio plazo.

Una de las notas más sugerentes es la apuesta por la cantera, con los Goni, Herrera, Laguardia, Lacruz? ¿Lo comparte?

Por supuesto. Es importante que haya jugadores que tengan un sentimiento especial hacia el Zaragoza porque se han formado allí. Ayuda a crear algo, más unión y cohesión. Es fundamental que haya futbolistas aragoneses.

Una de sus apuestas, Alberto Zapater, está triunfando en el Genoa. ¿Le sorprende?

Alberto ha estado dos o tres años sin brillar tanto como se le suponía por las circunstancias del club y las suyas propias. Pero su cometido no es brillar. Es un jugador del centro del campo muy consistente, de equipo. En Italia necesitan jugadores disciplinados, con talento, que sean buenos tácticamente. Alberto reúne todas esas cualidades y por ahora está haciendo las cosas bien. Ser titular en el Genoa y hacerse un nombre en el fútbol italiano tiene mucho mérito.

¿Ha hablado con él?

Hablé con él al principio y le di algún contacto en Génova.

Tras su marcha del banquillo zaragocista, Zapater se estancó. ¿Qué sucedió?

En primer lugar, quiero puntualizar que yo no me siento responsable de sus éxitos. No le regalé nada. Los jugadores se hacen a sí mismos. Alberto merecía jugar en Primera con 18 años. Era de la casa y tenía capacidad. Pero el desarrollo de un jugador nunca es lineal. No suben de nivel cada temporada.

Hace dos veranos, tras el descenso a Segunda, usted se reunió con Agapito Iglesias pero el encuentro no fructificó. ¿Considera que están abiertas las puertas del club?

El Zaragoza es mi casa. Así lo considero. Es el equipo en el que formé, en el que jugué en dos etapas, en el que fui entrenador en un momento

complicado, en unas condiciones difíciles y afortunadamente salieron bien las cosas. ¿Qué más puedo decir?

¿Con los dirigentes actuales sigue viendo la puerta abierta?

La reunión con Agapito Iglesias fue un encuentro cordial pero él ya había fichado a un entrenador. Esa es la realidad. Nada más.

¿Siente que se ha reconocido su labor, con las finales de Montjuic y el Bernabéu, amén de ráfagas de juego muy encomiables?

Sobre todo me siento identificado con lo último. En todos los equipos que he entrenado ha primado la forma de jugar, que el espectador se sienta bien. Los entrenadores tenemos un compromiso con el juego. Y más en el Zaragoza. Tanto el equipo como la afición tienen un gusto determinado. Con la premisa de ganar y de conseguir resultados, no puedes renunciar a eso.

Una parte importante de su Zaragoza fue Gaby Milito, lastrado por las lesiones en el Barça. ¿Han conversado?

Hace mucho que no coincidimos. Ha pasado tiempo en Argentina y ahora ha vuelto a Barcelona. Pero tengo la noticia de que está mejor y estoy seguro de que pronto será el Milito que fue.