El último esfuerzo en la temporada de la plantilla del Real Zaragoza fue dedicar un enjambre de aplausos a Gay y Nayim. Los futbolistas les rodearon en corrillo, escucharon los agradecimientos del entrenador por el trabajo y la implicación de estos meses y les brindaron una entrañable ovación que ni Agapito Iglesias ni Pedro Herrera escucharon porque no estaban allí. Fue el punto y final a la temporada y a los entrenamientos. Se acabó. Comienza ahora la plantilla un periodo de vacaciones que tiene inicio, pero no final.

Esta indefinición es resultado del caos y la desorganización que paraliza al club. Los futbolistas se marchan de vacaciones con un plan específico de entrenamiento, pero con el futuro flotando en el aire y sin fecha de regreso y reinicio de las operaciones. Salvo Uche y Obradovic, con la mirada puesta en el Mundial, y algunos de los lesionados que continuarán algún día más madrugando en la Ciudad Deportiva, los futbolistas ya descansan: Pennant voló a Londres a principios de semana, Paredes ya se centra en los preparativos de su boda en Oviedo, Ponzio cruzará el Atlántico? poco a poco, todos se diseminarán por la geografía, aunque sin la desconexión deseada con la pelota y el mundo que la rodea.

Varios de los futbolistas desconocen dónde deberán comenzar la pretemporada. El futuro les convoca fuera de Zaragoza y ayer vivieron su último día en la Ciudad Deportiva, donde la sesión de despedida congregó bromas y una fotografía de familia entre los futbolistas que quedan en la ciudad, el cuerpo técnico, los 'fisios' y preparadores, Miguel Pérez y Juan Mateo, del área de Prensa, el traductor Fernando Civeira y Andrés Fragoso, el nuevo utillero, que ayer, un día más, se abrochó las botas y la indumentaria de futbolista y participó como un jugador cualquiera en la relajada sesión. Para algunos como Carrizo o Luccin fue su última foto grupal como zaragocistas, y, para otros, con su permanencia en el club sujeta por un hilo, puede serlo: Pavón, Roberto, Adrián Colunga, Eliseu, Pulido?

Los que se queden, una vez que los despachos del club cobren vida y las primeras agitaciones del mercado les esquiven, aún no saben cuándo deben concluir las vacaciones y volver a los entrenamientos. El club aún no ha confirmado fecha alguna, entre otras razones, porque aún no ha confirmado ni siquiera un entrenador. En el calendario, el 12 de julio surge como el día más probable para el arranque de la pretemporada -que tampoco tiene escenario ni programa-, aunque todo dependerá del fin de semana en el que se inaugure la próxima Liga. La Federación Española maneja las fechas del 21-22 o 28-29 de agosto. Si se selecciona la primera, la pretemporada podría adelantarse algo a ese 12 de julio, de lo contrario, la plantilla regresará en torno a esa jornada, realizaría las habituales analíticas y revisiones médicas, y, al día siguiente, comenzaría a entrenar.

¿A las órdenes de quién? Gay continúa envuelto de incógnitas. El club aún no le ha comunicado nada. Han transcurrido trece días desde que ató la permanencia y tan solo se le ha transmitido que se reunirían con él un día de esta semana. Mientras llega la llamada, Gay conserva la calma. Su continuidad es un enigma, y su despedida de los futbolistas sonó incierta, ni una palabra de futuro, todo fue gratitud y reconocimiento al tiempo convivido. Gay se quedará el fin de semana en Zaragoza para asistir el domingo al partido del filial, su anterior equipo. De momento, no mira más allá, ni planifica un programa de entrenamientos ni dibuja en su mente una plantilla. También él y Nayim están de vacaciones indefinidas.