REAL ZARAGOZA

Un recorte imprescindible

El entorno del zaragocismo cree necesaria una profunda reestructuración económica para salir de su delicada situación.

Un recorte imprescindible
Un recorte imprescindible
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El Real Zaragoza prepara un contundente plan de ajuste económico para tratar de hacer frente a la complicadísima situación financiera por la que atraviesa la entidad. Su iniciativa consiste en hacer descender el presupuesto en alrededor de un cincuenta por ciento, tal y como informaba HERALDO en su edición de ayer.


La idea no ha sido acogida con sorpresa entre los distintos ámbitos del zaragocismo. Ni tampoco entre los expertos en gestión deportiva. Que consideran el recorte imprescindible, ante la delicada situación económica que enunció el presidente Eduardo Bandrés en la última Junta General de Accionistas.


El panorama dibujado en aquella cita por un catedrático de Economía ha servido para llamar la atención y concienciar al entorno del club sobre la necesidad de tomar medidas cuanto antes para reconducir la situación por la que atraviesa la entidad.


“La intención es buena –destacaba ayer el ex presidente José Ángel Zalba-. Es la única forma de administrar un club, porque no se puede gastar más de lo que se ingresa. El problema es cómo se va a hacer: cómo se van a resolver los compromisos ya adquiridos por el Real Zaragoza”.


Es la principal duda que genera la iniciativa. Más aún cuando las necesidades deportivas del equipo crecen, sin duda, en Primera División. Y el recorte que se anuncia puede generar complicaciones y reduce, sin duda, las aspiraciones de un equipo siempre empeñado en retos notables, que deberá cambiar sus aspiraciones.


“Lo lógico es que un club que acumula una deuda tan importante adopte medidas de carácter drástico porque si no estaría condenado a desaparecer”. Es el punto de vista de Fernando París, presidente de GEDA, la asociación de gestores deportivos de Aragón. “El deporte profesional -apuntala- debe estar donde los recursos le permitan estar. Y se trata de adaptar los gastos con la realidad”.


Junto a esta reflexión es coincidente otro punto de vista: ¿hasta qué punto el Real Zaragoza debió haber iniciado la campaña con semejante presupuesto? “Tal vez, querían asegurarse el ascenso”, señala Fernando París, aunque reconoce que lo lógico hubiera sido afrontar el recorte nada más consumarse el descenso.


Y así se expresa también el ex presidente Ángel Aznar: “Me pareció arriesgado el planteamiento económico de principio de temporada”.


Fue una cuestión que se le planteó a Agapito Iglesias, máximo accionista, en una comparecencia multitudinaria recién consumada la pérdida de categoría. Sin embargo, entonces el consejero delegado apeló a su solvencia económica para apartar cualquier duda sobre la apuesta deportiva del conjunto blanquillo.


Pero las tornas han cambiado con el paso de los meses y la situación del club exige una intervención urgente.


Algo que también tienen asumidas las peñas: “El club anda mal y la Segunda División arruina -se explica Arnaldo Félix, presidente de la Federación de Peñas-. Por eso, veo bien que recorten los gastos, procurando no perjudicar al equipo”.


Se trata ahora de saber llevar a cabo la imprescindible reestructuración con el mínimo efecto deportivo, algo muy complicado. Aunque se coincide en algo: el compromiso y la apuesta por la cantera, “contar con gente de Aragón, comprometida”, empeñada en sacar adelante el proyecto.


En medio de un mar de dudas surge una convicción: resulta imprescindible.