REAL ZARAGOZA

¿Y Obradovic?

El Real Zaragoza espera hoy o mañana el regreso del lateral serbio, que se encuentra en su país desde la semana pasada y cuya participación en el equipo es prácticamente inédita.

Obradovic, en uno de sus escasos entrenamientos junto a sus compañeros del Real Zaragoza.
¿Y Obradovic?
ESTHER CASAS

Es un caso extraño, poco habitual, cuanto menos llamativo. Hablamos del paso de Ivan Obradovic por el Zaragoza, una experiencia translúcida, casi invisible desde el mismo momento en que el club aragonés confirmó su fichaje hace casi tres meses por una cifra próxima a los 3,5 millones de euros. Desde entonces, Obradovic se ha convertido en un asunto complejo dentro del Zaragoza, algo así como una caja de sorpresas. El lateral zurdo serbio lleva alejado de los planes de Marcelino desde la tercera jornada, tras jugar contra el Valladolid. Su desaparición de los entrenamientos grupales, las convocatorias y la vida del club desde que sufrió molestias en la rodilla izquierda hace ya casi dos meses es insólita, especialmente si se tiene en cuenta que, según el Real Zaragoza, no se encuentra de baja médica. Más insólita es su participación. Desde que el Zaragoza confirmó su fichaje el sábado 22 de agosto, Obradovic ha jugado más del doble de minutos con el Partizan de Belgrado, su club de procedencia, y su selección que con el conjunto aragonés.

 

El último capítulo de su peculiar historia ha sido su viaje, con permiso, a Serbia, donde ha pasado la última semana arreglando unos trámites burocráticos, apartado del plan de trabajo del Real Zaragoza. En Belgrado, Obradovic ha aprovechado los últimos días para actualizar su visado y su permiso de residencia. El papeleo está ya solucionado y, en el club aragonés, se asegura que Obradovic regresará hoy o mañana a la disciplina del Zaragoza. Eso es lo seguro, prácticamente. La incertidumbre es cómo regresará, cómo estará su rodilla, cómo estará su ánimo. No en vano a Obradovic le persigue la sombra de la inadaptación. Joven, 21 años, acostumbrado a vivir rodeado de su familia y su novia, dicen de él que es un chico introvertido y que nunca había abandonado su país. Marcelino y el club, sabedores de ello, le han mimado cuidadosamente desde el mismo día que cayó en sus manos ante el riesgo de que el serbio se viera envuelto en un serio problema de integración. Lo curioso de todo es que Obradovic ha aprendido el español como una bala y comienza a manejarse en el idioma con veloz soltura.

 

La extrañeza del caso se centra en sus molestias en la rodilla izquierda. El futbolista advirtió problemas al flexionar la articulación antes de jugar contra el Sporting de Gijón. Desde el primer momento se le restó gravedad al asunto. Médicamente, de hecho, no la tenía. Obradovic paró sus esfuerzos, pero días después las molestias persistían. Se le efectuaron exámenes radiológicos que confirmaron la inexistencia de una lesión. No obstante, Radomir Antic, seleccionador serbio, lo citó para jugar los partidos internacionales de mitad de octubre correspondientes a la fase de clasificación para la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010. Obradovic, pese a que en el Real Zaragoza la convocatoria no gustó mucho a causa de esas molestias físicas, viajó y se unió a su selección. No jugó contra Rumanía, aunque sí lo hizo 60 minutos contra Lituania. Obradovic volvió. Las molestias, también. El futbolista comenzó a trabajar en el gimnasio, con un tratamiento específico para solucionar cuanto antes sus problemas , y desde entonces a Obradovic solo lo rodean las incógnitas.

 

Su viaje a Serbia es solo una singularidad más de una experiencia que ya nació con sorpresas. El Real Zaragoza anunció su fichaje el sábado 22 de agosto. Fue el primer movimiento oficial de mercado de Gerhard Poschner, por entonces, flamante director general. Habiendo sido confirmado, Obradovic jugó el día después partido de la liga serbia con la camiseta del Partizan. Incluso le marcó un gol al Ivanjica. Un día más tarde de aquello, el lunes 24 de agosto, fue presentado en La Romareda. Pero, Eduardo Bandrés, presidente del Zaragoza, se encargó de matizar las cosas: "Es un jugador que viene con un contrato por cinco años para incorporarse al Zaragoza a partir del viernes. Quiero explicarlo. En el curso de las negociaciones que se han llevado a cabo con el Partizan de Belgrado, siempre se nos ha solicitado que el jugador pudiera participar en la fase previa de clasificación de la Champions o de la UEFA, en este caso ya UEFA, que termina precisamente esta semana".

 

Y Obradovic se fue a Eslovaquia a jugar un jueves contra el MSK Zlina. Allí se despidió del Partizan. Ya en España, debutó un sábado ante el Tenerife en el estreno liguero. Jugó tres minutos y ya no ha participado mucho más, 24 contra el Sevilla y 85 ante el Valladolid, su única titularidad. En total 112 minutos. De hecho, ha jugado más esta temporada con el Partizan y con Serbia (330 minutos) que con el Real Zaragoza.