Objetivo Rivero

Zaragoza. La campaña de refuerzos del CAI Zaragoza comenzará por la base. Por el base. El cuerpo técnico del conjunto aragonés iniciará la edificación del nuevo proyecto con la firma de un director de juego contrastado en la categoría. En estos momentos, el mejor situado es Pedro Rivero, valor estable en la LEB que la temporada pasada se estrenó sin demasiado brillo en la ACB defendiendo la camiseta del Cajasol.

La marcha de Quino Colom al Fuenlabrada de la ACB ha acelerado las gestiones para robustecer la demarcación de base en el CAI Zaragoza. La salida del joven talento catalán, que rindió a notable nivel en los escasos minutos que disfrutó durante el pasado curso, supone una sensible merma. Para cubrir esta ausencia, el club aragonés apuesta por Pedro Rivero como contratación preferente.

A punto de cumplir los 30 años, Rivero (186 centímetros) ha labrado su carrera en la Liga LEB. Sólo ha competido en la ACB en el último ejercicio liguero. En el Cajasol de Sevilla firmó una tarjeta estadística irregular. Disputó 26 partidos, con 436 minutos en pista (17 de media). Facturó la cifra redonda de 100 puntos (3,8 de media). Desde la línea de tres puntos no se mostró especialmente certero (25%). El porcentaje creció desde los tiros de dos (54%). Paradójicamente, desde la línea de personal no erró lanzamiento alguno 17/17 (100%). Su promedio de rebotes capturados es inferior a la unidad por partido (0,9). El balance entre balones recuperados y perdidos ofrece un saldo desfavorable (21 contra 35), igual que el de tapones (ninguno puesto y ocho sufridos). Las asistencias efectuadas no alcanzan el par por encuentro (1,8). Un equilibrado capítulo de faltas (28 cometidas y 32 recibidas) elaboran una valoración por partido de 3,9. Los datos anteriores pertenecen a la ACB. Son los más cercanos en el tiempo, pero en ningún caso los más representativos, pues corresponden a un escenario distinto al que va a actuar Rivero en la temporada que ahora nace.

La premisa seleccionable

El CAI Zaragoza pretende cerrar la operación cuanto antes. El resto de demarcaciones dependen de la estructuración del puesto de base. El diseño del equipo está subordinado a la cantidad de jugadores seleccionables. Willy Villar desea que al menos uno de los dos bases sea seleccionable, para continuar con la formación del conjunto un tanto más liberado de este lastre. La salida de Colom obliga a firmar a un jugador con este perfil. Esto supone la contratación de un solo jugador extranjero (o ninguno) como director de juego.

Pedro Rivero del Caz inició su andadura profesional en la Liga EBA jugando en Ponferrada y en las categorías inferiores del Real Madrid. Sus buenos números y su gran dirección le permitieron dar el salto a la por aquel entonces LEB 2 en las filas del Universidad Complutense de Madrid. Pasó por el Pozuelo de Alarcón y por Gandía, donde completaría un año lleno de éxitos proclamándose incluso campeón del concurso de triples en el All Star. Esto hizo que el Cantabria Lobos se fijase en él. A partir de aquí, otras cinco temporadas en LEB Oro en Cáceres, León y Tenerife, hasta que hace dos años llegó para triunfar en el Villa de los Barrios. En las dos últimas temporadas logró el galardón de mejor base de la competición. En su última campaña en Los Barrios disputó más de 30 minutos, anotando más de 11 puntos de media. Esta es la pauta que pretende seguir en el CAI Zaragoza.