El Real Zaragoza ha encontrado en Antonio Tomás su decimotercera incorporación de la temporada. Procedente del mercado de jugadores libres, el ex del Deportivo de La Coruña, de 26 años, es un centrocampista de corte defensivo que llega para reforzar una de las posiciones más cubiertas de la plantilla. Más hormigón para una línea que, si de algo adolece, es de un hombre que aglutine el despliegue defensivo con ciertas nociones de distribución y organización.

Meira, Ponzio, Micael, Zuculini, Pinter y Edu Oriol son los centrocampistas con los hasta ahora contaba Javier Aguirre para la medular. Una nómina vasta, especialmente si se compara con otras posiciones como la de lateral derecho o delantero centro. Sin embargo, el 'stock' existente parece insuficiente para el técnico mexicano.

Esta valoración se fundamenta en el hecho de que, por ejemplo, haya preferido hacer jugar a Abraham en dicha demarcación por delante de Zuculini o Pinter, ahora lesionado. Una forzada solución que la adquisición de Antonio Tomás parece sofocar. Su polivalencia en el centro del campo, podría jugar tanto por delante de la defensa como en la posición intermedia que en la actualidad ocupa Ponzio, parece su mejor aval.

Experiencia demostrable

Durante su periplo en el Deportivo de la Coruña, el medio cántabro se tornó en un habitual en las alineaciones de Miguel Ángel Lotina. Con un historial de lesiones largo, llegó a disputar un total de 20 partidos la pasada campaña. Una racha que se vio interrumpida por las temidas molestias físicas. En total, el futbolista suma 118 partidos en la elite, una cifra que le aporta cierto peso en forma de experiencia.

De juego simple y sin adornos, tiene como debe su falta de gol. Es sintomático que en seis temporadas en la elite, desde que debutara con el Racing de Santander durante la 2005/06, no haya conseguido ni una sola diana en ninguna competición. Un problema añadido para el conjunto aragonés, que durante los últimos años precisa de aportación goleadora desde la segunda línea.

Para un Real Zaragoza que priorice entorpecer el juego del rival, en línea con lo demostrado ante el Málaga, el futbolista cántabro se torna en una interesante novedad. Con mayor riqueza táctica que técnica, una tendencia casi innata a minimizar riesgos y dotes de brega, su presencia puede hacerse habitual en el esquema de Aguirre.