​El equipo de rescate consigue descender el cuerpo del montañero muerto en los Andes

Su hermano ha reconocido la labor de quienes "llevan dos días sin dormir y trabajando al límite".

El equipo de rescate que trataba de recuperar el cuerpo del montañero vasco Fernando Osa, fallecido en el nevado Ojos del Salado, ha logrado su objetivo y ha descendido el cadáver que se encontraba en la parte argentina de este volcán, fronterizo con Chile, han informado fuentes de la familia.


Según ha explicado Jon Osa, hermano del escalador guipuzcoano, aunque afincado en Vizcaya, el cuerpo ya ha sido descendido, si bien la familia desconoce aún cuándo podrá ser repatriado porque quedan pendientes numerosos trámites que, en su opinión, retrasarán todo "al menos unos días".


Jon Osa ha expresado no obstante el "agradecimiento" de la familia a todas las personas que han participado en el rescate, así como a los compañeros de su hermano, entre ellos Paco Vicario, quien permaneció a unos 6.500 metros de altitud, junto a él hasta su muerte, mientas otro montañero descendía para pedir ayuda.


El hermano del escalador fallecido ha recordado además que el equipo de rescate "tuvo muchos problemas para bajarlo" y lo ha conseguido "después de un terrible esfuerzo porque han estado trabajando allí sin descanso alguno, incluso teniendo que parar a descansar sí o sí, porque estaban exhaustos".


"Hoy han hecho el último esfuerzo y han bajado, aunque llevan dos días trabajando. Espero que no haya habido ningún problema ni ningún otro accidente a parte del nuestro", ha precisado Jon Osa, quien ha querido reconocer la labor de estas personas que "llevan dos días sin dormir y trabajando al límite".


El equipo de auxilio argentino había partido por tierra y debido a la complejidad de la ruta ya se estimaba que el rescate no finalizaría hasta este sábado, según indicaron a Efe fuentes del consulado de España en la ciudad argentina de Córdoba.


El montañero vasco, Fernando Osa falleció el día de año nuevo en la cordillera de los Andes tras permanecer dos jornadas aislado y necesitado de auxilio, en compañía del alpinista vizcaíno Paco Vicario, a unos 6.500 metros de altitud en la parte argentina del nevado Ojos del Salado, ubicado en la frontera con Chile.


Tras la muerte de Osa, Paco Vicario inició el descenso del monte por su propio pie y contactó con el equipo de rescate argentino que subía en su auxilio. Según informó el consulado de España en Córdoba, estaba previsto que, una vez los equipos de rescate lograran completar el descenso del cuerpo, siguiendo los procedimientos judiciales habituales, éste fuera sometido en Argentina a los primeros exámenes forenses para determinar la causa de la muerte.