REAL ZARAGOZA

Lío a cuenta de los bocadillos inexistentes

El Zaragoza tuvo que salir ayer al paso para intentar explicar por qué ni el Huesca ni el Teruel tuvieron la cena pactada tras el torneo.

Los directivos del Real Zaragoza, la SD Huesca y el CD Teruel comieron en El Cachirulo con diferentes autoridades antes del torneo.
Lío a cuenta de los bocadillos inexistentes
TINO GIL/R. Z.

El Memorial Carlos Lapetra no deja de colear. El último episodio viene marcado por el detalle del Real Zaragoza de no tener prevista una ligera cena para el Huesca y el Teruel, que debían emprender regreso a sus localidades cuando concluyó el torneo cerca de las doce de la noche. El conocimiento público de los sucedido en la madrugada de anteayer -una vez concluyó el Memorial Carlos Lapetra- con los dos equipos invitados obligó ayer al club zaragocista a emitir una nota oficial en su web dando su particular versión de los hechos e intentando rectificar un nuevo error de formas.


En concreto, el equipo oscense se vio obligado a improvisar su cena de camino y tuvo que encargar unos bocadillos en Zuera gracias a la intermediación de Rodri, miembro de la dirección deportiva y natural de esta localidad. Los dirigentes azulgranas estaban convencidos de que el Real Zaragoza habría preparado un lote de bocadillos y refrescos para que la expedición del Huesca cenase en el autocar de regreso a la capital altoaragonesa. Cuando, al abandonar el estadio, los solicitaron a los responsables zaragocistas (en concreto, al delegado Juan Morgado), se encontraron con la sorpresa de que no existían. Según reza el contrato redactado para acometer el torneo, el Zaragoza se comprometía a "hacerse cargo de los gastos derivados" de la participación del Huesca y el Teruel. Y en esas partidas, según conversaciones mantenidas en los días previos, se incluían el precio del autocar de desplazamiento y la cena de después del partido, cuya preparación y entrega iba a llevar a cabo el Zaragoza.


En el Huesca ha sentado mal el detalle, que viene precedido por la falta de elegancia del club blanquillo de orquestar el torneo dando por hecha la participación del equipo azulgrana sin haber tenido la simple deferencia de informarle con anterioridad. Según fuentes del club azulgrana, y aunque por ese contrato que el propio Real Zaragoza mostró parcialmente en su página web la SAD que dirige Agapito Iglesias debería de asumir los gastos de la cena del Huesca, "no hay voluntad de reclamarlos porque es algo que debería haber salido de ellos sin que ahora tengamos que ir detrás a pedírselo", declararon en la entidad de El Alcoraz.


En el seno azulgrana se recordó ayer que, en las conversaciones entre clubes previas a la celebración del torneo, el Zaragoza justificó que los aficionados del Huesca y el Teruel tuvieran que abonar entrada -no así los del equipo blanquillo- en la necesidad de "sufragar los gastos" derivados del evento. En ellos debía de englobarse la atención mínima a los invitados, consistente en "hacerse cargo del viaje y la cena", sus únicas pretensiones. Una cena física, real.


Por su parte, el C.D. Teruel confirmó anoche que la cena de sus jugadores, técnicos y empleados tuvo lugar en el mismo estadio de La Romareda durante la disputa del tercer y definitivo partido entre zaragocistas y oscenses. Los dirigentes turolenses se procuraron unas pizzas y unas bebidas en las gradas mediante una llamada telefónica a una empresa de servicio a domicilio y, nada más recibir el trofeo, emprendieron el viaje a Teruel.


En Pinilla no hay tanto malestar como en Huesca, aunque se reconoce que actuar así no es lo habitual en estos casos por parte de los anfitriones. El CD Teruel sí piensa envían la factura al Zaragoza para que le abone el importe del autobús y el de la improvisada cena italiana.