La decimoctava edición de la Carrera Popular Carrefour de Zaragoza está en plena cuenta atrás. Quedan cinco días para que se celebre una de las pruebas, referente del calendario nacional, que se ha convertido con el paso de los años en una fiesta del atletismo. Más de 7.500 personas han recogido sus dorsales en los centros comerciales que Carrefour tiene en la ciudad (la inscripción sigue abierta y es gratuita). El reto de los organizadores de esta prueba, que este año cumple su mayoría de edad, es superarse y acercarse a la participación de 2007, con más de 20.000 personas.

A las diez de la mañana se dará el pistoletazo de salida pero no desde Gertrudis Gómez de Avellaneda, como era tradición, sino desde la avenida de María Zambrano. Un cambio motivado por las obras de la Expo. El evento presenta múltiples alicientes: el lúdico, que implica el fomento de la práctica deportiva buscando un beneficio para la salud; y el competitivo, al más alto nivel de exigencia física. Así, la carrera está abierta a todo el abanico de edades, sin distinción de sexos ni de condición, que podrán disfrutar de dos circuitos: uno corto, de cuatro kilómetros, por la margen izquierda de la ciudad; y otro largo, de 9.000 metros, que cruzará el río Ebro para recorrer algunas de las calles más céntricas de Zaragoza.

Pero hay más atractivos, como el poder compartir una matinal con atletas que han escrito hermosas páginas del deporte en este país o que están a punto de protagonizarlas. Así, la Carrefour, que coordina en el apartado técnico el carismático ex atleta internacional José Manuel Abascalm vivirá un duelo entre dos grandes del maratón, el soriano Abel Antón y el vitoriano Martín Fiz, que repetirán once años más tarde la mayor gesta del atletismo español en el Campeonato del Mundo de Atenas, un doblete histórico: oro para Antón -que repetiría en 1999 en Sevilla- y plata para Fiz.

Otro de los alicientes será la lucha por el primer puesto del palmarés femenino que se disputarán dos aragonesas que miran a los Juegos de Pekín: la maratoniana María José Pueyo, que correrá con la alegría de saber que ya tiene el pasaporte para su estreno olímpico, y la mediofondista Isabel Macías, que luchará este verano por hacerse con una plaza. Los favoritos al triunfo en el apartado masculino son el oscense Felipe Carnicer y el gerundense José Luis Blanco. El catalán, subcampeón de Europa de los 3.000 obstáculos y en la recta final para Pekín, también quiere hacerse un hueco en el ranquin de ilustres ganadores de esta Popular Carrefour, como Mathew Birir, Kipiego Kororia, Ezequiel Bitok, Philip Mosima, Enrique Molina, Fabián Roncero, Isaac Viciosa, Alberto García, El Penti, Roberto García, José Ríos, Eliseo Martín o los propios Antón y Fiz.