REAL ZARAGOZA

La maldición del estreno

El Zaragoza solo ha ganado en dos de los últimos diez debuts ligueros, sufriendo además seis derrotas.

Mal presagio (2007/08). Derrota en Murcia por 2-1.
La maldición del estreno
ESTHER CASAS

El próximo domingo el Real Zaragoza desprecinta un nuevo torneo liguero en Riazor. El conjunto blanquillo debería estar prevenido ante una maldición que le azota a lo largo de la última década. La estadística es terrible. De los últimos diez estrenos en el campeonato de la regularidad, la escuadra aragonesa ha caído derrotada en seis ocasiones y únicamente ha sido capaz de apuntarse dos victorias, ambas en La Romareda. Una tendencia que José Aurelio Gay intentará alterar.


El nacimiento de cada Liga se ha convertido en un dramático compromiso, especialmente cuando se produce a domicilio. En este lapso de diez años ha debutado seis veces como visitante, sufriendo cuatro varapalos (Espanyol, Deportivo de la Coruña, Real Murcia y Levante) y firmando dos empates (Córdoba y Atlético de Madrid).


El Deportivo es precisamente uno de los rivales que más ha contribuido para engordar esta mala racha. En 2003, en el regreso a Primera División con Paco Flores, profanó La Romareda (0-1). Tres años después, ambas escuadras volvieron a citarse en la fecha inaugural, esta vez en Riazor. Fue la 'premiere' oficial del primer proyecto de Agapito Iglesias, con Víctor Fernández en el banquillo. Un desfile de estrellas, con Pablo Aimar, Andrés D'Alessandro, los hermanos Milito o Ewerthon se aprestaban a cobrarse su primera víctima. El camino se antojaba plácido, con un tanto de Diego Milito, pero los coruñeses voltearon el marcador y atraparon los tres puntos (3-2).


La siguiente campaña, sin Gaby Milito pero con Ricardo Oliveira, el Real Zaragoza se derrumbó en la Nueva Condomina (2-1), un hecho absolutamente imprevisto y sorpresivo. Fue el primer capítulo de una lamentable historia que concluyó con el descenso a Segunda División. Se soñaba con el cielo futbolístico y se terminó en un pozo muy oscuro.


El Ciudad de Valencia (2-1 en 2008), el Olímpico de Montjuic (2-1 en 2001), el Nuevo Arcángel de Córdoba (0-0 en 2002) o el Vicente Calderón (0-0 en 2005) han sido otros testigos de esta deriva.


Las únicas alegrías han sido al calor de la propia afición. La más recordada, en 2004 frente al Getafe. Un 3-1 con goles brasileños (dos de Álvaro y uno de Savio) aupó al liderato al conjunto de Víctor Muñoz. La pasada campaña se superó con sufrimiento al Tenerife (1-0).