Un Huesca de menos a más se hace con la victoria ante el Girona

Fue de menos a más, salió a flote de cada arreón del rival y consiguió una victoria holgada. La SD Huesca regresó de su visita al Girona con un 1-3 que acabó dejando un buen sabor de boca por cómo supieron gestionar los últimos minutos tanto Ambriz como sus hombres después de una tarde en la que las sensaciones no estaban siendo las mejores y en la que su pegada fue fundamental; cuatro tiros a puerta y tres dianas. Andrés sostuvo a los suyos con sus paradas, Mateu abrió el marcador en la primera gran llegada de los azulgranas y Seoane, duda casi hasta el pitido inicial debido a la fisura en un dedo sufrida en el derbi con el Real Zaragoza, firmó un doblete. Los tres puntos de Montilivi dan continuidad al 0-0 de La Romareda y permiten seguir con el objetivo de reengancharse a la zona alta antes de que el martes llegue el Málaga y el domingo se viaje a Burgos.

Frente a un rival también con miras ambiciosas al inicio del curso, pero que ha encallado en los puestos de descenso, los de Ambriz, con las sensibles bajas de Pulido y Ferreiro, vivieron una primera parte poco atractiva en la que vieron cómo le anularon dos goles por fuera de juego al conjunto de Míchel Sánchez, el técnico con el que los azulgranas ascendieron a Primera División hace dos campañas. Casi todo se reservó para el segundo periodo. Fue entonces cuando Mateu golpeó primero, cuando Pablo Moreno empató, cuando el Huesca pareció a la deriva y cuando resurgió.

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Aunque al descanso la estadística le concedía más posesión a los visitantes, lo cierto es que ésta fue estéril y cada vez más alejada del área de Juan Carlos. Los primeros 45 minutos transcurrieron dentro de una línea plana por parte de los dos equipos en la que de vez en cuando apareció algún sobresalto.

De inicio los de Ambriz consiguieron robar el balón en la mitad del campo rival, pero conforme los catalanes, que estrenaban sistema con tres centrales, se fueron asentando, les resultó más complicado. Su juego fue muy horizontal y se echaron en falta las llegadas por banda de Mateu y Joaquín. Atrás, la pareja de centrales conformada por Salvador, única novedad en el once con respecto al del derbi, y Miquel alternó buenas acciones con otras que deben ser corregidas.

Las mejores aproximaciones a la meta del Girona fueron de Buffarini y Mikel Rico. El lateral derecho cazó a los trece minutos un rechace fruto de un pase hacia atrás de Seoane, que había avanzado hasta la línea de fondo tras robar un balón, para disparar cerca del palo y ya en el descuento fue el argentino el que centró. Rico cabeceó muy forzado y no pudo orientar de forma correcta. Entre un ataque y otro hubo algún buen pase al área y alguna intentona individual.

Enfrente Ambriz había alertado del peligro de los albirrojos a balón parado y no le faltó razón. Ya a los dos minutos Bernardo lo intentó de cabeza en una falta; también Bueno en un córner y Juanpe al filo del descanso. Nahuel Bustos se aventuró desde su campo al ver a Andrés adelantado y poco después desde fuera del área. El argentino se quedó con las ganas de marcar a pesar de que a los 41 minutos mandó el balón a la red en una jugada en la que estaba en fuera de juego tras una pérdida del Huesca al igual que le había ocurrido antes a Arnau.

La reanudación del partido no pudo ser más positiva. Primero perdonó Aleix García, estrellando el cuero en la madera, y en la reacción Mateu adelantó a los oscenses. En una ofensiva que partió de la brega de Joaquín, Escriche sirvió hacia atrás y el valenciano no desaprovechó el que era el primer disparo entre los tres palos del Huesca.

El verse con el marcador a favor hizo que los azulgranas se acomodasen atrás ante un Girona que apretó en busca del empate. Especialmente los catalanes insistieron por alto. En un pase al punto de penalti Álex Baena conectó con Nahuel que forzó a que Andrés se pusiese de nuevo la capa de superhéroe. Fue todo un aviso. Para tratar de dar algo de aire entraron Mosquera y Nwakali por Rico y Pitta, pero al poco de producirse la sustitución se sufrió el empate. En el enésimo balón colgado, Stuani llegó antes que Andrés para dejar de cabeza a Pablo Moreno, ambos acababan de entrar en el campo. Se revisó largo y tendido un posible nuevo fuera de juego, pero esta vez el VAR no falló a favor de los intereses visitantes. El golpe aturdió a los azulgranas y dio más alas a los de Míchel Sánchez. Samu Saiz coqueteó con el 2-1 y también Stuani, pero en ambos casos se toparon con Andrés.

De cara a los últimos diez minutos, Gaich y Ratiu recogieron los testigos de Escriche y Joaquín. En un tiro de Jairo, Andrés volvió a ser salvador. Todo pintaba muy oscuro y sin embargo lo que se produjo fue el 1-2. Ratiu fue el que centró al palo largo donde Seoane superó a Juan Carlos. Después, al borde del noventa Gaich tuvo la tercera diana, no la consiguió entonces, pero ya en el descuento se la entregó a Seoane para que remachase la victoria.

Ficha técnica

Girona FC: Juan Carlos, Santi Bueno, Juanpe, Bernardo, Arnau (Ureña, 85), Aleix García, Álex Baena (Kebe, 85), Jairo (Valery, 85), Samu Saiz, Borja García (Moreno, 69) y Nahuel Bustos (Stuani, 69).

SD Huesca: Andrés; Buffarini, Salvador, Miquel, Miguel; Joaquín (Ratiu, 80), Seoane, Rico (Nwakali, 67), Mateu; Escriche (Gaich, 80) y Pitta (Mosquera, 67).

Goles: 0-1, min. 47: Mateu. 1-1, min. 71: Pablo Moreno. 1-2, min. 83: Seoane. 1-3, min. 96: Seoane.

Árbitro: Moreno Aragón (Comité Madrileño) amonestó con tarjeta amarilla a los locales Juanpe (11), Aleix García (83), Kebe (90’) y Stuani (95’), y a los visitantes Joaquín (22), Mateu (28), Miquel (42) y Miguel (67)

Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de liga de Segunda División disputado en el estadio de Montilivi en el que por primera vez desde la pandemia se permitió un aforo del 100%. La asistencia registrada fue de 6.101 espectadores.