SD Huesca: Castigados en las dos áreas

La SD Huesca ha salido trasquilada de sus dos desplazamientos consecutivos a Ponferrada (3-1) y Gerona (1-0). Dos salidas difíciles que afrontaba con el objetivo de revocar sus números a domicilio y mantener la racha de imbatibilidad de cinco jornadas que había comenzado con el derbi aragonés y se detuvo en el triunfo ante el Lugo en El Alcoraz. Los errores defensivos y la falta de mordiente en ataque han penalizado a los de Míchel Sánchez en la búsqueda de soluciones para recuperar la mejor versión azulgrana.

El pasado sábado en Montilivi se completó el partido más pobre de toda la temporada en el aspecto ofensivo, con un solo disparo entre los tres palos y otros dos remates fuera. La expulsión del delantero Rafa Mir en el minuto 72 contribuyó a dificultar la actividad de la SD Huesca en el área rival hasta quedarse sin hacer gol por octava vez esta temporada. En las siete anteriores, sin embargo, se había dispuesto de más ocasiones para conseguirlo; también, en encuentros de alta exigencia como los de Almería (1-0), Cádiz (1-0), Numancia (1-0) o Mirandés (2-0).

La semana anterior contra la Ponferradina fue precisamente Rafa Mir el que anotó en una de las escasas oportunidades de que dispuso la SD Huesca, que sumó tres remates entre los tres palos y una sola intervención del portero René. Asier Riesgo, meta del Girona, tuvo todavía menos trabajo. La entrada al campo de Shinji Okazaki en lugar de Dani Raba pareció conformar una dupla prometedora, con el murciano escorado en la banda derecha. Sin embargo, dejó a su equipo con diez. Curiosamente, en el mismo minuto que la última roja directa que había visto el equipo azulgrana: en la jornada 37 de la pasada temporada, un Betis-Huesca ya intrascendente en el que el colegiado expulsó a Pulido por una entrada sobre Guardado. La otra expulsión de este curso, la de Josué Sá en Lugo, había tenido lugar por una doble amonestación.

El Huesca tratará de ajustar piezas y recuperarse anímicamente para el vital encuentro de este sábado ante el Almería en El Alcoraz (16.00). Tres puntos separan a los de Míchel Sánchez, cuartos, de los de José María Gutiérrez, Guti, segundos. De hecho, el equipo oscense podría concluir la jornada 28 en la segunda plaza. Para ello, debería superar a los andaluces por más de un gol de diferencia para anotarse el ‘golaverage’ particular y que el Real Zaragoza no gane en Elche. A pesar de las dos derrotas, los azulgranas se mantienen al acecho del ascenso directo porque los rivales directos lo permiten. Los almerienses han perdido ante Elche y Racing y empatado con Numancia y los zaragocistas acumulan tablas con Cádiz y Fuenlabrada además de contar con la cita pendiente en Anduva, que se jugará el miércoles 19 de febrero.

Tres goles encajados en tiempo de prolongación han hecho perder a la SD Huesca cinco puntos en Elche (1-1), Oviedo (1-1) y Gerona. Desde el mes de diciembre, en nueve jornadas, el equipo de Míchel ha empeorado sus registros ofensivos y defensivos. Ha recibido en este periodo el mismo número de goles (13) que en las 18 primeras jornadas y ha anotado nueve. Es decir, que ha encajado 1,4 de promedio frente al 0,7 del primer periodo. El doble. Atrás quedan los nueve partidos imbatidos entre agosto y noviembre.

Eso ha repercutido en sumar menos puntos, el 59 % de los que había en juego hasta la jornada 18 (32 de 54 posibles) y el 40 % desde la 19 (11 de 27 posibles). Dejó la portería a cero por última vez el 30 de noviembre en Alcorcón, en su último triunfo a domicilio, y sigue agarrado a El Alcoraz para mantener sus opciones de ascenso directo. La de Montilivi fue la décima derrota de la campaña, una más que en la del ascenso y, por ahora, una menos que en la 2016-17, la del ‘play off’.