El Huesca busca tranquilidad para afrontar la parte decisiva de la liga

El apelativo de "final" ha sido el más utilizado en las comparecencias de esta semana de los jugadores del Huesca para referirse al encuentro que esta tarde, a partir de las 18.00, disputarán contra la UD Llagostera. Los oscenses pueden dar un puñetazo en la mesa en lo que respecta a sus aspiraciones de salvar la categoría y coger algo de aire después de semanas moviéndose en el más fino alambre. También su rival ha tildado de vital su visita a El Alcoraz, pues los catalanes se enfrentan a la que podría ser su última bala para aferrarse a la Segunda División una temporada más, ya que en este momento se encuentran a seis puntos del conjunto de Anquela, que marca la salvación, empatado a 39 puntos con el Mallorca.

Ingredientes no faltan para vaticinar un duelo cuerpo a cuerpo esta tarde en El Alcoraz, en el que el principal interrogante lo plantea la idea de quién llevará la iniciativa en el juego, si los oscenses, empujados por su condición de equipo local, o el Llagostera, ante su crítica situación y las urgencias que puede darles su necesidad de puntos. Son estas posibilidades las que más debate han abierto en la plantilla y su entorno en la última semana, ya que el Huesca demostró en su reciente victoria en el Carlos Tartiere que puede hacer mucho daño basándose en una defensa ordenada que permita salir a la contra. Aprovechando así la velocidad de hombres como Darwin Machís y Alexander González en los extremos o Samu Sáiz en la media punta.

Ha sido a través de esta fórmula con la que el conjunto de Anquela ha logrado sus mejores resultados y sensaciones, ante rivales superiores en lo que a objetivos y posición en la tabla se refiere, como el Alcorcón o el Nástic de Tarragona. Pero después de esos valiosos triunfos, las vibraciones positivas se han desvanecido en las jornadas siguientes, ofreciendo el Huesca una imagen mucho menos intensa en defensa. Por tanto, los oscenses andan todavía a la búsqueda de cuál es su auténtica versión.

Anquela habló de ello en su comparecencia previa, ya que aseguró que los buenos equipos se caracterizan por mantener una identidad "en las duras y en las maduras", para asegurar que está convencido de que sus hombres alcanzaran la suya en las seis jornadas que restan para el final de la campaña.

El primer paso para ello pasaba por encontrar un once ideal y Anquela parece tener ya su equipo inicial tipo. El técnico adelantó en rueda de prensa que repetirá la alineación que eligió la semana pasada en Oviedo, dándoles continuidad después del triunfo. Mantiene por tanto a Mikel Arruabarrena, que sigue entrenándose con un plan alternativo, al tener una fisura en el pie. Con el equipo titular ya desvelado, queda para la sorpresa el resto de la convocatoria, para saber si Anquela seguirá dejando fuera a Luis Fernández y Tyronne, después de asegurar que esta semana "hemos entrenado todos muy bien".