Cristian Álvarez, el emblemático portero del Real Zaragoza moderno, ha dado por fin del paso adelante que le permite abandonar la enfermería y regresar a una convocatoria, prácticamente después de cuatro meses de baja médica.

El guardameta argentino retorna a la citación del técnico, Julio Velázquez, que también recupera a Aguado, sancionado el último día. Quien se queda fuera es el otro portero que viene de pasar por las manos de los médicos y fisios, Rebollo. Sorprende que sea el destarifado Poussin quien siga incluido entre los 22 expedicionarios que, desde las 17.00 de este sábado, emprendieron el camino del País Vasco en autocar, por autopista, para jugar el domingo a las 18.30 frente al Eibar en Ipurúa. La concentración y pernocta será en el Hotel Occidental de Bilbao, a 47 kilómetros de la localidad guipuzcoana.

Los citados por Velázquez son: Badía, Cristian Álvarez y Poussin como trío de cancerberos; y Zedadka, Gámez, Lecoeuche, Mollejo, Mouriño, Jair, Lluís López. Francés, Aguado, Francho, Moya, Grau, Vaquero, Manu Vallejo, Valera, Maikel Mesa, Sergi Enrich, Azón y Bakis, como jugadores de campo. Se quedan fuera, por problemas de lesión, Nieto, Raúl Guti y Borge. Del filial, esta vez solo va Vaquero.

El equipo regresará a casa en la noche del domingo, vía carretera, nada más concluir el partido en tierras guipuzcoanas. 

Cristian Álvarez llevaba fuera de órbita por completo desde que se resintió de una lesión reciente en la segunda parte del partido Real Zaragoza-Eibar de la primera vuelta (curiosamente), jugado el 21 de octubre. Antes, en Andorra, el día 5 de ese mes, ya había sufrido la primera dolencia muscular, de la que fue recuperado de manera aprontada en apenas 10 días ante los primeros síntomas de inadaptación y errores mayúsculos de Poussin, en los duelos ante el Alcorcón y el Sporting de Gijón, este en El Molinón.