El Real Unión de Irún ha hecho oficial la llegada del zaragocista Marcos Luna como cedido hasta final de temporada. El canterano del Real Zaragoza jugará hasta el 30 de junio en el histórico club vasco, de Primera RFEF, después de apenas contar con oportunidades esta temporada a las órdenes primero de Fran Escribá y después de Julio Velázquez. 

El acuerdo contempla una cesión hasta el 30 de junio con una opción de compra para el Real Unión, entidad que, desde el pasado otoño, se integra en el ‘hólding’ de los propietarios del Aston Villa inglés, donde entrena Unai Emery, técnico de Hondarribia muy vinculado al Real Unión, pues su abuelo y otros familiares, así como él mismo, han militado en la larga historia del club.

La opción de compra por Marcos Luna está desvinculada de objetivos deportivos, por lo que es voluntaria y dependerá de su rendimiento estos meses en su nuevo equipo. En caso de no ejecutarse esa clásusula, el futbolista regresará al Real Zaragoza el próximo 30 de junio, donde tiene contrato hasta 2026.

Marcos Luna también tenía una propuesta para jugar en el filial del Atlético de Madrid, club vinculado al Real Zaragoza que ya lo quiso hace un año para su segundo equipo. Entonces, no se concretó la operación, y el canterano comenzó a entrar en los planes de Fran Escribá con un gran nivel. Pero una lesión de rodilla cortó de cuajo esa progresión. Siempre vigilado por las mejores canteras de España, Marcos Luna se recuperó y se quedó este curso como parte de la primera plantilla aunque con dorsal del filial. Esta temporada, no recuperó la relevancia que llegó a alcanzar con Escribá.

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Tampoco Julio Velázquez le ha tenido en sus planes, y solo ha jugado 169 minutos de liga repartidos en tres encuentros, además de jugar los 90 minutos del duelo de Copa del Rey contra el Atzeneta. Ante la llegada del mercado de enero, Juan Carlos Cordero agilizó su salida. De este modo, el canterano -una de las promesas más sólidas de la Ciudad Deportiva en el último lustro- seguirá su carrera en el Real Unión, entrenado por Íñigo Idiakez, hermano de Imanol, exentrenador del Zaragoza, y clasificado en mitad de tabla del grupo 1 de Primera RFEF. El tiempo dirá si es un adiós momentáneo o definitivo.