Real Zaragoza-Mirandés: Todo en contra
Probablemente, ni el Real Zaragoza era tan bueno cuando ganó los cinco primeros partidos ni es tan malo ahora que ha sacado un mísero empate en los tres últimos. El fútbol muchas veces empuja a los equipos hacia inercias en las que cuando todo puede ir bien, va bien; y a otras en las que todo lo que puede ir mal, va mal. Como la vida misma.
El equipo de Fran Escribá propuso más, tuvo más ocasiones, pisó más el área rival... pero se encontró con todo en contra. Para empezar, con sus dificultades para crear un fútbol fluido, para tener una idea clara de cómo atacar los partidos. Hay dudas sobre a qué quiere jugar este Zaragoza esta temporada. Marc Aguado fue el eje alrededor del cual giró todo el fútbol del conjunto aragonés en los primeros partidos, pero ese clavo del abanico zaragocista está ahora en el banquillo.
Además, ayer el Real Zaragoza se encontró con casi todas las adversidades posibles. Todas las veces que la moneda cayó cara en los primeros partidos, ahora está saliendo cruz. Sergi Enrich fue expulsado tras una acción que resultó violenta, pero en la que no tuvo intención de golpear al rival. Azón se encontró con el larguero en un remate claro, un rechace hizo que Jair se metiera gol en su propia portería... No hay tiempo para lamentos. El jueves juega de nuevo el Real Zaragoza. Los tres puntos serán la mejor medicina para un conjunto que se le está poniendo mal color.
