La baja de Eguaras para el partido del próximo sábado contra el Tenerife agrava el rompecabezas del centro del campo al que JIM trata de encontrar solución desde que conoció la pasada semana el positivo de Francho Serrano y su ausencia en los siguientes dos partidos.

Eguaras vio la quinta amarilla de su primer ciclo disciplinario una vez terminado el partido contra el Oviedo, tras acudir a protestar al árbitro De la Fuente Ramos. Esta amonestación, reflejada en el acta del encuentro, acarrea la suspensión de un partido, por lo que el mediocentro navarro, intocable para JIM desde su llegada, se perderá el partido contra el Tenerife.

Su baja se une a la del lesionado Sanabria y a la de Francho, aún aislado tras su positivo, dejando así el centro del campo del Real Zaragoza muy mermado, pues Javi Ros continúa al margen del grupo por unos problemas de rodilla inespecificados por el club. Juan Ignacio Martínez deberá reformular esa línea con una configuración inédita desde su aterrizaje.

En Oviedo, apostó por Zapater como titular, una novedad pasó de puntillas por el partido, sin apenas incidencia en el funcionamiento del equipo, siendo el capitán relevado. El ejeano volverá a ser una de las opciones a mano de JIM, como los otros dos centrocampistas que tuvieron presencia en la segunda mitad, James Igbekeme, suplente en el Tartiere después de asentarse en el once, y Adrián, alternativa que el técnico ya valoró la pasada semana.

Nominalmente, el Zaragoza no tiene más disponible para ocupar esa parcela central del campo, más allá de reubicar a Bermejo en zonas interiores como en Oviedo. Otra vía es Vuckic, a quien JIM ya ocupó en esa región del campo en Copa contra el Alcorcón. El filial ofrece la opción de Castillo, otro miembro de la generación de oro de Iván Martínez, centrocampista de pulmón, ida y vuelta, que se entrenó este lunes con el primer equipo y que emerge como clara posibilidad para ocupar una plaza en la lista de convocados.

De cara a Tenerife, sin Eguaras, Francho Serrano, Sanabria y Javi Ros, el técnico Juan Ignacio Martínez deberá recomponer una línea con James, Zapater y Adrián (o Bermejo) o, en cambio, mantener el giro táctico de Oviedo, con ese 4-2-3-1. En ese caso, o Larrazabal podría conservar su puesto en la titularidad o entrar ahí Zanimacchia. Otra vía es devolver a Narváez a la doble punta, acompañando a Alegría u otro delantero, y alinear a Pep Chavarría en el costado izquierdo del centro del campo. En ese caso, Bermejo operaría por la derecha, con Alberto Zapater y James Igbekeme en la sala de máquinas.