Quizá la estadística eleve al rango de noticia el gol de Gaizka Toquero. Desde luego, cierto es que desde el 13 de enero no encajaba gol el Reus en su guarida del Camp Nou Municipal. O sea, seis partidos, 540 minutos, sin que Edgar Badía replegara balón alguno en las redes locales. El Zaragoza capturó un punto el pasado viernes porque fue capaz de marcar donde casi nadie marca. Pero también porque su portero volvió a ser factor. Cristian siempre suma. Incluso, en algunas ocasiones, hasta multiplica, como en Pamplona. Tres notables intervenciones y la habitual sensación de normalidad que transmite a todo el sistema defensivo aragonés volvieron a ser básicas para que el Real Zaragoza volviera a puntuar a domicilio.

El foco apuntó poco al área aragonesa en la primera media hora. Tocaba bien el Zaragoza, decidido desde el inicio a colonizar el territorio rival. Hasta Verdasca se atrevió a avanzar. Bueno, a avanzar se ha atrevido otras veces... Me refiero a progresar con criterio con la pelota. Lo hizo el portugués en su mejor acción ofensiva con la camiseta aragonesa. Participaron en la combinación el Borja Iglesias más solidario y un Toquero oportunista y resolutivo. La condición protagonista de Cristian vino después. Fue directamente proporcional al empuje del Reus. Avisó primero Juan Domínguez mediado el primer tiempo, tras una deficiente entrega de Eguaras en una zona en la que conviene más asegurar que crear. El peligro catalán creció de forma exponencial conforme se aproximaba el intermedio. Tuvo el gol Fran Carbia en el 39. Y también Yoda en el 45. En la primera, Cristian sacó a córner en una acertada intervención junto al poste. En la segunda, disparó muy duro y abajo Yoda, desviando otra vez con acierto Cristian a saque de esquina.

Marcó el Reus nada más regresar de los vestuarios, en una acción en la que el zaragozano Miramón enseñó cómo se fuga y se centra desde la línea de fondo. Gol tras remate canónico del formidable Lekic. Qué pena, resbaló Cristian. Habría que haber visto si no resbala... Lekic pudo con los centrales zaragocistas, pero se encontró con Cristian durante toda la noche. La igualada la pudo quebrar David Haro cuando el partido agonizaba. Tiró cruzado, pero Cristian sacó una mano izquierda de lujo. Gus Ledes lo intentó en el añadido, atajando sin apuros Cristian, el portero que siempre suma, el portero que volvió a ayudar a puntuar el pasado viernes al Real Zaragoza.