Las negociaciones del Real Zaragoza con el Osasuna para lograr la contratación del medio centro Fran Mérida en este mercado invernal de fichajes han podido sufrir este jueves, 5 de enero, un cambio drástico en su curso previsto. Repentinamente, tras la derrota osasunista por 0-3 ante el Eibar 48 horas antes en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey, la directiva rojilla ha fulminado al entrenador Joaquín Caparros, que no ha llegado a cumplir ni dos meses al frente del equipo navarro, al que llegó entrado noviembre como relevo de Enrique Martín Monreal. Y, lo más sorprendente de la maniobra, ha sido la designación como tercer técnico de la nefasta temporada de los de El Sadar al que era hasta estos momentos su director deportivo, el serbio Petar Vasiljevic.

Es un movimiento con escasos precedentes. Los dirigentes que encabeza el presidente Javier Sabalza argumentan que, quien mejor conoce las condiciones de la plantilla para intentar la pirueta de la salvación de un equipo que, camino del ecuador de la liga, camina sin rumbo como colista en la tabla y solo 7 puntos en sus alforjas, es el hacedor de la misma. Es decir, el director deportivo. Y como Vasiljevic tiene carnet de entrenador, el Osasuna lo ha bajado de los despachos al banquillo. Un giro a la desesperada, un requiebro que va a retratar a todos los implicados: el propio Vasiljevic y, por supuesto, a los futbolistas de la plantilla rojilla.

Y ahí, justo en ese punto, asoman en la superficie los intereses del Real Zaragoza en, al menos, uno de los futbolistas que interesan a Narciso Juliá para reforzar la plantilla aragonesa en enero: el centrocampista creativo Fran Mérida. El futbolista catalán, ex del Huesca, Atlético de Madrid, Real Sociedad o Arsenal de Londres, entre otros, no contaba en los planes de Caparrós y así lo había hecho público el técnico sevillano semanas atrás, circunstancia que favoreció el interés zaragocista, los movimientos de sus representantes y la postura de escuchante del Osasuna. Ahora, sin Caparrós y con Vasiljevic al frente del vestuario, esa premisa ha desaparecido por completo.

¿Cuál será el papel de Fran Mérida en los planteamientos de Vasiljevic de ahora en adelante? El exdirector deportivo serbio del Osasuna fue, en definitiva, quien obró su fichaje el pasado verano, cuando el jugador estaba en el Huesca. Es una de sus apuestas tras el ascenso a Primera en la promoción, ganada en la final al Girona en junio. 

Hay una frase de Petar Vasiljevic en la rueda de prensa de la tarde de este jueves en El Sadar que puede dar una pista de las intenciones del reconvertido ejecutivo en entrenador de campo del Osasuna. "Estamos entrando en un mes complicado y decisivo. Soy el que trajo a los jugadores, el que confía en ellos y sé que lo tienen", ha dicho en un pasaje de su intervención el balcánico.

Así pues, en las oficinas del Real Zaragoza han sonado las alarmas respecto de esta vía abierta hace un tiempo para intentar incorporar a Fran Mérida al club aragonés en los próximos 25 días. Las coordenadas de navegación del Osasuna han cambiado radical e inesperadamente en este 5 de enero. Y Juliá, Valentín y Cuartero (el director general está siendo un elemento muy activo en este mercado invernal de 2017) necesitan verificar cuanto antes cuál va a ser el rol de Fran Mérida en el equipo osasunista a partir de ahora, si permanece vigente lo que Caparrós había diseñado respecto de su escaso o nulo concurso en el futuro de la temporada o, por el contrario, Vasiljevic piensa utilizarlo y, por ello, es obligado desistir por parte zaragocista de su contratación.