El Real Zaragoza es un conjunto voluble, de caras opuestas. Su fortaleza como local, donde presenta los mejores guarismos de la competición, se contrapone con su inconsistencia lejos de casa: ni una sola victoria en sus nueve desplazamientos. Una negativa trayectoria que el conjunto aragonés, a un triunfo de los puestos de ‘play off’, tratará de modificar en Vallecas, el próximo domingo (18.00), para robustecer sus opciones de ascenso. "Con lo que hacemos, no nos da. Sabemos, por ello, que lejos de La Romareda debemos dar un paso más", explica Javi Ros, portavoz ayer de la plantilla, consciente de la necesidad de proseguir la escalada.

En este sentido, el centrocampista recuerda "la igualdad existente en la Segunda División"; una categoría de máxima exigencia, sin apenas concesiones, que castiga con severidad cualquier desatención. "Es muy complicado sumar los tres puntos fuera de casa –insiste Ros–. Pero estamos motivados, convencidos de nuestras opciones, y ya tenemos muchas ganas de jugar el partido. Esperemos que contra el Rayo se produzca, por fin, nuestra primera victoria como visitante", señala el jugador, que considera "muy importante" afrontar el parón navideño "con un nuevo triunfo", porque "devolvería la normalidad y, sobre todo, posicionaría al equipo en un lugar destacado" en la clasificación.

El triunfo del pasado domingo en La Romareda, frente a un combativo Oviedo (2-1), ha rearmado anímicamente al grupo para sus futuros compromisos. Y a la victoria contribuyó Javi Ros, quien recuperó la titularidad frente a los asturianos, una vez superados los efectos de la fisura que sufrió en la mandíbula, tras un golpe recibido en el partido contra el Reus. El navarro, incluso, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente para recomponer esa pieza ósea. "Pero ahora, ya toca ganar fuera de casa", insiste el centrocampista del Real Zaragoza.

En sus desplazamientos, los datos del cuadro aragonés resultan muy significativos. Ninguna victoria en nueve partidos. Cuatro puntos de 27 posibles, tras empatar en Lugo (3-3), en Tarragona (0-0), en Valladolid y en Mallorca (2-2). En el resto de sus actuaciones, el equipo zaragozano ha doblado la rodilla. Lo hizo ante el Levante (4-2), el Numancia (2-1), el Sevilla Atlético (2-1), el Getafe (1-0) y el Cádiz (3-0). "¿La mala racha fuera? Si supiera las razones, las diría. Creo que se debe, principalmente, a lo igualado que está todo en la Segunda División. Esperamos cambiar esta tendencia ante el Rayo Vallecano", sostiene.

Exigente cita

Eso sí, en Vallecas aguarda una cita de rango mayor. "Será, sin duda, un partido muy complicado. Nos enfrentamos con un equipo recién descendido, con muchos jugadores que hasta hace muy poco estaban jugando en Primera División", recuerda el centrocampista navarro, quien considera que el Rayo ha mejorado sus prestaciones en las últimas semanas, con el reciente cambio de entrenador. "La llegada del nuevo técnico le ha dado la vuelta a la situación. Se trata de un rival muy peligro", advierte Javi Ros.

Rubén Baraja sustituyó en el banquillo a José Ramón Sandoval, el pasado 8 de noviembre, y el Rayo recuperó entonces su esencia competitiva. Además, se presenta a la cita tras haber obtenido el triunfo en las dos últimas jornadas: superó al Alcorcón en Vallecas (2-0), y el pasado fin de semana se impuso a domicilio al Nástic de Tarragona (0-1). "Para romper la mala dinámica fuera, no hay mejor escenario que Vallecas", anuncia Javi Ros.