El partido del próximo domingo en Soria, entre el Numancia y el Real Zaragoza (18.00) no va a tener el mismo envoltorio de las últimas décadas, desde que ambos clubes empezaron a coincidir tanto el Primera como en Segunda División. Las relaciones institucionales, que ya venían detectando rozamientos en los últimos dos años, han acabado por deteriorarse definitivamente durante el pasado verano. El Real Zaragoza, de forma abierta y oficial, ha hecho pública su nueva postura respecto del vínculo afectivo que siempre existió con un club vecino como el numantino y, en un comunicado escueto y directo, anuncia una ruptura que venía cantada en las últimas semanas.

La SAD zaragocista advierte de que "ha transmitido al CD Numancia su decisión de no proceder a la venta de entradas, en las oficinas del club, del partido que este domingo disputan ambos equipos en el estadio de Los Pajaritos. La directiva zaragocista declina, asimismo, la invitación al almuerzo oficial, en el caso de que lo hubiere".

De inmediato, los regentes del Real Zaragoza explican, con nombre y apellidos, que "el motivo es la postura contraria a la propuesta de modificación del convenio concursal del Real Zaragoza, defendida en la Comisión Delegada por el Vicepresidente de la Liga y consejero del CD Numancia, Víctor Martín. Esta posición resultaba inesperada, ante la buena relación mantenida tradicionalmente entre ambos clubes".

Por último, los dirigentes aragoneses apostillan que "el Real Zaragoza lamenta el perjuicio que esta decisión pudiera provocar a sus seguidores, pero estima que debe proceder en defensa de los derechos e intereses del club" y que "asimismo, trabajará para intentar recuperar la armonía institucional que ambas entidades han mantenido en los últimos años".

No se trata, por lo tanto, de una ruptura drástica, definitiva y con tono beligerante. Al contrario, por encima y al margen de la figura del actual consejero del Numancia, Víctor Martín, desde el Real Zaragoza se quieren mantener encendidos los vínculos entre dos clubes que siempre estuvieron bien avenidos por multitud de afectividades comunes. Pero, como indica el comunicado oficial de la entidad blanquilla, la presencia de dicho gestor en el Numancia y su conducta respecto del Real Zaragoza en los últimos tiempos impiden seguir el día a día como si nada hubiese sucedido. Martín no viene actuando lealmente con el club zaragozano y, hace dos meses, colmó la paciencia y el aguante cabal de los responsables directivos del Real Zaragoza.

Así que, en lo sucesivo, a expensas del devenir de los acontecimientos, las relaciones institucionales entre el Numancia y el club zaragocista se instalan en la frialdad y el puro protocolo llevado a los mínimos que requiere la disputa de un partido de fútbol. Habrá representación del Real Zaragoza en el palco de Los Pajaritos y el equipo no estará solo, por descontado. Pero la afinidad con el cuadro numantino ya no será como hasta ahora.