Ranko Popovic se quedó como casi todos los zaragocistas tras empate del Real Zaragoza (1-1) ante el Mirandés. Por una parte, decepcionado por el punto, ya que su equipo tuvo varias opciones para sentenciar el duelo; por otra, aliviado con el empate, ya que el conjunto burgalés tuvo varias ocasiones en el tramo final, alguna tan clara como el remate al larguero de Lago Junior.

“Es una pena que no hayamos sacado algo más. Podríamos haber marcado otro, pero también podría haber acabado de forma diferente, porque ellos han tenido un larguero”, ha indicado el serbio: “Durante 70 minutos hemos tenido el partido muy controlado. Si hubiéramos estado más acertados y más tranquilos... Hemos tenido varias ocasiones para marcar el segundo, y no puedes perdonar tanto ante un rival como el Mirandés. Tenemos que sacar conclusiones de este partido”.

Popovic también ha señalado el aspecto físico como uno de los problemas de sus pupilos. “Hay jugadores que no están en su mejor nivel físico... Freddy estaba tocado y lo he cambiado por una cuestión física. No podía jugar mucho más tiempo, y a Jaime también le falta un poco de ritmo, pero pensaba que iba a compensar eso con otras cosas. Pero el equipo se ha ido atrás y no hemos tenido tranquilidad con el balón”, ha indicado Popovic, quien ha hablado de más nombres propios: “Algunos jugadores no tenían chispa. Por ejemplo, Pedro no estaba como siempre por el balón... Por eso entró Ortuño, para controlar el balón de espaldas y darles tiempo a que llegaran”.