Paco Herrera: "Lo que he vivido en el Real Zaragoza me lo quedo para mí"

Paco Herrera se ha despedido del Real Zaragoza, de su afición y de sus jugadores. Lo ha hecho en La Romareda, estadio en el que hace poco más de una semana pidió su marcha y en el que se ha escrito buena parte de su trágico desenlace. El entrenador, destituido este lunes tras perder contra la Ponferradina y acumular siete partidos sin ganar, ha acudido al estadio zaragozano sin ánimo de revancha, con un mensaje tras el que no se han admitido preguntas de la prensa.

Herrera ha lamentado el final, que no ha sido "el deseado", y ha dado las gracias a todos, "sin excepción". Sin embargo, en su discurso no ha habido explicaciones sobre sus casi nueve meses en Zaragoza, ni de su relación con la dirección general, ni de nada de nada. "No esto aquí para lamentar nada ni para quejarme de nada. Simplemente he venido para decir adiós. Lo que he vivido aquí queda solamente para mí", ha asegurado el exentrenador del Real Zaragoza.

"El final no ha sido el deseado. Ni la afición, ni el club, ni mi gente y yo deseabamos este final", ha reconocido Herrera, quien sí ha hablado de sus jugadores. En ellos ha encontrado el mayor apoyo durante las semanas de incertidumbre, y algunos incluso han acudido a La Romareda para presenciar en directo el adiós del técnico. Tres de los cuatro capitanes -faltaba Alcolea-, Leo Franco, Abraham y Luis García, así como dos de sus hombres fuertes en el vestuario, Barkero y Cortés, han dado la cara en la sala de prensa del estadio, a la que también ha acudido su esposa. Junto a García Pitarch, y en representación del club, también estaban Jordi Bruixola, Moisés García León y Carlos Cuartero.

"Me quedo con el final, la despedida con mis jugadores. Uno por uno, dándonos un abrazo", ha asegurado Paco Herrera, quien ha reconocido que no ha cumplido con los objetivos que se marcó el pasado verano. Ni ha podido lograr el ascenso ni la reconciliación entre el club y la afición. "Cuando llegué dije que el camino hacia la reconciliación era el fútbol. Desgraciadamente solo lo he conseguido por etapas, no lo he logrado al cien por cien. Guardamos los motivos, no es momento para eso", ha dicho.

Por último, Herrera ha dejado un mensaje de gratitud. "Estoy aquí para dar las gracias a todos, sin excluir a nadie. Pero especialmente a mis jugadores, porque han sido mi compañía durante ocho meses", ha indicado, antes de pedir la unión del zaragocismo: "Ahora, pedir que el nuevo entrenador reciba la ayuda de todos, de la afición y de los jugadores. Que cuando el equipo pierda, pierda todo el mundo con el equipo, y cuando gane, gane todo el mundo. Gracias".