Real Zaragoza

Henríquez levanta la expectación del zaragocismo

El chileno se ejercitó con sus nuevos compañeros en La Romareda bajo la atenta mirada de cientos de aficionados que aplaudieron todas sus acciones.

Heríquez en su primer entrenamiento como zaragozista
Henríquez levanta la expectación del zaragocismo
ASIER ALCORTA

Presentación oficiosa, que no oficial, la cual está programada para este jueves a las 13.00 en La Romareda, de Ángelo Henríquez ante la que va a ser, por esta temporada, su nueva afición. El ariete chileno se entrenó junto al resto de sus compañeros en la sesión que el Real Zaragoza llevó a cabo este jueves por la tarde en el estadio municipal. Entorno especial para el que, a pesar de su insultante juventud, solo tiene 19 años, debe ser el delantero centro blanquillo para la presente campaña.


Al menos, así parecieron entenderlo los cientos de aficionados que se acercaron para presenciar un evento que estuvo en el alero durante más tiempo del deseado. A nadie se le escapa que, en principio, el cambio de escenario para la práctica estaba pensado con la intención de que el jugador atendiese a los medios antes de saltar al verde. Sin embargo, el retraso en el envío de una documentación por parte del Manchester United, su club de procedencia y que lo ha cedido al conjunto aragonés por un año sin opción de compra, impidió al conjunto blanquillo llevar a cabo su planificación inicial. De hecho, por un lapso de tiempo, se llegó a dudar de que el atacante pudiera ejercitarse, algo que finalmente sí ocurrió para alegría de los curiosos que se acercaron hasta la instalación de la plaza de Eduardo Ibarra.


Sobre el césped, el equipo dio su particular bienvenida a su nuevo integrante. Colocados en corro en el centro del campo, los futbolistas blanquillos dejaron al iniciado en medio, quién, de espaldas, con manos y pies apoyadas en el suelo, trató de huir de la improvisada jaula sin mucho éxito. Pequeña novatada que arrancó los primeros aplausos de la grada. Aunque, sin duda, el mayor estruendo fue reservado para su primera acción. Tras los típicos ejercicios de calentamiento, Herrera ordenó una rutina orientada a entrenar el remate a puerta. Precisamente, la especialidad de Henríquez. Así, en el primer balón que le llegó en la frontal del área, el chileno facturó un zapatazo directo a la escuadra derecha de la portería. Golazo.


El resto de la sesión, el entrenador zaragocista utilizó a su nuevo pupilo como punta de un tridente con Roger y Diego Suárez por bandas. Faro de un ataque con mucha movilidad y hambre de gol. Desde la grada normalmente reservada para aquellos que acceden a La Romareda en silla de ruedas, la plana mayor de la entidad no se perdió el evento. Suso García Pitarch, director general, divisó el entrenamiento acompañado por Moisés García, Luis Carlos Cuartero y Paco Checa.